Print Page Options

20 Es obvio que no hay mérito en ser paciente si a uno lo golpean por haber actuado mal, pero si sufren por hacer el bien y lo soportan con paciencia, Dios se agrada de ustedes.

21 Pues Dios los llamó a hacer lo bueno, aunque eso signifique que tengan que sufrir, tal como Cristo sufrió[a] por ustedes. Él es su ejemplo, y deben seguir sus pasos.

22 Él nunca pecó
    y jamás engañó a nadie.[b]
23 No respondía cuando lo insultaban
    ni amenazaba con vengarse cuando sufría.
Dejaba su causa en manos de Dios,
    quien siempre juzga con justicia.
24 Él mismo cargó nuestros pecados
    sobre su cuerpo en la cruz,
para que nosotros podamos estar muertos al pecado
    y vivir para lo que es recto.
Por sus heridas,
    ustedes son sanados.
25 Antes eran como ovejas
    que andaban descarriadas.
Pero ahora han vuelto a su Pastor,
    al Guardián de sus almas.

Read full chapter

Footnotes

  1. 2:21 Algunos manuscritos dicen murió.
  2. 2:22 Is 53:9.

20 Si son castigados por hacer el mal, no hay por qué felicitarlos cuando soporten el dolor, pero si hacen el bien y soportan con paciencia el sufrimiento, Dios los bendecirá. 21 Dios los llamó a soportar tal sufrimiento. Es que Cristo mismo sufrió por ustedes, y así les dejó un ejemplo a seguir para que ustedes sigan sus pasos.

22 (A)«Él no cometió pecado
    ni jamás engañó a nadie».[a]

23 Cuando insultaban a Cristo, él no respondía con insultos, y cuando sufría no respondía con amenazas. Él dejó todo en manos de Dios, quien siempre juzga con justicia. 24 En la cruz, Cristo cargó nuestros pecados en su propio cuerpo para apartarnos de ellos y para que vivamos como le agrada a Dios; por las heridas que él sufrió, ustedes fueron sanados. 25 Ustedes eran como ovejas perdidas, pero ahora han regresado al Pastor y Protector de sus vidas.

Read full chapter

Footnotes

  1. 2:22 Cita de Is 53:9.

20 Si se os golpeara por ser culpables, ¿qué mérito tendría vuestro aguante? Pero que sufráis y aguantéis aun habiendo hecho el bien, es cosa que agrada a Dios. 21 Precisamente a eso habéis sido llamados: a seguir las huellas de Cristo, que padeciendo por vosotros, os dejó un modelo que imitar: 22 Cristo, que ni cometió pecado ni se encontró mentira en sus labios. 23 Cuando lo injuriaban, no respondía con injurias, sino que sufría sin amenazar y se ponía en manos de Dios, que juzga con justicia. 24 Cargando sobre sí nuestros pecados, los llevó hasta el madero para que nosotros muramos al pecado y vivamos con toda rectitud. Habéis sido, pues, sanados a costa de sus heridas; 25 Antes, en efecto , andabais como ovejas descarriadas, pero ahora habéis vuelto al que es pastor y guardián de vuestras vidas.

Read full chapter

20 Pues si a ustedes los castigan por haber hecho algo malo, ¿qué mérito tendrá que lo soporten con paciencia? Pero si sufren por haber hecho el bien, y soportan con paciencia el sufrimiento, eso es agradable a Dios. 21 Pues para esto los llamó Dios, ya que Cristo sufrió por ustedes, dándoles un ejemplo para que sigan sus pasos. 22 Cristo no cometió ningún pecado ni engañó jamás a nadie. 23 Cuando lo insultaban, no contestaba con insultos; cuando lo hacían sufrir, no amenazaba, sino que se encomendaba a Dios, que juzga con rectitud. 24 Cristo mismo llevó nuestros pecados en su cuerpo sobre la cruz, para que nosotros muramos al pecado y vivamos una vida de rectitud. Cristo fue herido para que ustedes fueran sanados. 25 Pues ustedes andaban antes como ovejas extraviadas, pero ahora han vuelto a Cristo, que los cuida como un pastor y vela por ustedes.

Read full chapter

20 Porque ¿qué mérito hay en soportar malos tratos por hacer algo malo? Pero cuando se sufre por hacer el bien y se aguanta el castigo, entonces sí es meritorio ante Dios. 21 Y ustedes fueron llamados para esto. Porque también Cristo sufrió por nosotros, con lo que nos dio un ejemplo para que sigamos sus pasos. 22 Cristo no cometió ningún pecado, ni hubo engaño en su boca.(A) 23 Cuando lo maldecían, no respondía con maldición; cuando sufría, no amenazaba, sino que remitía su causa al que juzga con justicia. 24 Él mismo llevó en su cuerpo nuestros pecados al madero, para que nosotros, muertos ya al pecado, vivamos para la justicia. Por sus heridas fueron ustedes sanados.(B) 25 Porque ustedes eran como ovejas descarriadas,(C) pero ahora se han vuelto al Pastor que cuida de sus vidas.

Read full chapter