Add parallel Print Page Options

Y oyó David en el desierto que Nabal esquilaba sus ovejas.

Entonces envió David diez criados, y díjoles: Subid al Carmelo, é id á Nabal, y saludadle en mi nombre.

Y decidle así: Que vivas y sea paz á ti, y paz á tu familia, y paz á todo cuanto tienes.

Read full chapter