Add parallel Print Page Options

Su esposa Jezabel entró y le preguntó:

―¿Por qué estás tan deprimido que ni comer quieres?

―Porque le dije a Nabot el jezrelita que me vendiera su viñedo o que, si lo prefería, se lo cambiaría por otro; pero él se negó.

Ante esto, Jezabel su esposa le dijo:

―¿Y no eres tú quien manda en Israel? ¡Anda, levántate y come, que te hará bien! Yo te conseguiré el viñedo del tal Nabot.

Read full chapter