1 Pedro 3:1-8
Nueva Versión Internacional (Castilian)
Deberes conyugales
3 Así mismo, esposas, someteos a vuestros esposos, de modo que, si algunos de ellos no creen en la palabra, puedan ser ganados más por vuestro comportamiento que por vuestras palabras, 2 al observar vuestra conducta íntegra y respetuosa. 3 Que vuestra belleza no sea la externa, que consiste en adornos tales como peinados ostentosos, joyas de oro y vestidos lujosos. 4 Que vuestra belleza sea más bien la incorruptible, la que procede de lo íntimo del corazón y consiste en un espíritu suave y apacible. Esta sí que tiene mucho valor delante de Dios. 5 Así se adornaban en tiempos antiguos las mujeres santas que esperaban en Dios, cada una sumisa a su esposo. 6 Tal es el caso de Sara, que obedecía a Abraham y lo llamaba su señor. Vosotras sois hijas de ella si hacéis el bien y vivís sin ningún temor.
7 De igual manera, vosotros esposos, sed comprensivos en vuestra vida conyugal, tratando cada uno a su esposa con respeto, ya que como mujer es más delicada,[a] y ambos sois herederos del grato don de la vida. Así nada estorbará vuestras oraciones.
Sufriendo por hacer el bien
8 En fin, vivid en armonía los unos con los otros; compartid penas y alegrías, practicad el amor fraternal, sed compasivos y humildes.
Read full chapterFootnotes
- 3:7 ya que … delicada. Lit. como a vaso más frágil.
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