Add parallel Print Page Options

Entonces uno de los ancianos me dijo*: «No llores; mira, el León(A) de la tribu de Judá(B), la Raíz de David(C), ha vencido para abrir el libro y sus siete sellos». Miré, y vi entre el trono (con los cuatro seres vivientes) y los ancianos(D), a un Cordero(E), de pie, como inmolado(F), que tenía siete cuernos(G) y siete ojos(H), que son los siete Espíritus de Dios(I) enviados por toda la tierra. Él vino y tomó el libro de la mano derecha(J) de Aquel que estaba sentado en el trono(K). Cuando tomó el libro, los cuatro seres vivientes(L) y los veinticuatro ancianos(M) se postraron(N) delante del Cordero(O). Cada uno tenía un arpa(P) y copas[a] de oro(Q) llenas de incienso, que son las oraciones de los santos(R). Y cantaban* un cántico nuevo(S), diciendo:

«Digno eres de tomar el libro(T) y de abrir sus sellos, porque Tú fuiste inmolado(U), y con Tu sangre compraste[b] para Dios(V) a gente de toda tribu(W), lengua, pueblo y nación.

10 Y los has hecho un reino(X) y sacerdotes(Y) para nuestro Dios; y reinarán sobre la tierra(Z)».

11 Y miré, y oí la voz de muchos ángeles alrededor del trono(AA) y de los seres vivientes(AB) y de los ancianos(AC). El número de ellos era miríadas de miríadas, y millares de millares(AD), 12 que decían a gran voz:

«El Cordero(AE) que fue inmolado(AF) es digno de recibir el poder, las riquezas, la sabiduría, la fortaleza, el honor, la gloria y la alabanza».

13 Y oí decir a toda cosa creada que está en el cielo, sobre la tierra, debajo de la tierra y en el mar, y a todas las cosas que en ellos hay(AG):

«Al que está sentado en el trono(AH), y al Cordero(AI), sea la alabanza, la honra, la gloria y el dominio por los siglos de los siglos(AJ)».

Read full chapter

Footnotes

  1. 5:8 O tazones.
  2. 5:9 O redimiste.