2 Samuel 20:14-22
La Palabra (Hispanoamérica)
14 Sebá recorrió todas las tribus de Israel y llegó hasta Abel Bet Maacá, donde se congregaron todos los beritas entrando tras él. 15 Llegaron también los de Joab y sitiaron a Sebá en Abel Bet Maacá; construyeron una rampa de asedio contra la ciudad, la colocaron sobre la muralla y toda la gente de Joab se puso a golpear la muralla para derribarla. 16 Entonces una mujer sensata se puso a gritar desde la ciudad:
— ¡Escuchen, escuchen! Díganle a Joab que se acerque aquí, que quiero hablarle.
17 Él se acercó y la mujer le preguntó:
— ¿Eres tú Joab?
Él respondió:
— Sí, yo soy.
La mujer le dijo:
— Por favor, escucha las palabras de tu sierva.
Joab le dijo:
— Te escucho.
18 Entonces ella dijo:
— Antiguamente se solía decir: “Que pregunten en Abel, y caso resuelto”. 19 Somos israelitas pacíficos y fieles ¡y tú pretendes destruir una ciudad importante de Israel! ¿Por qué quieres arruinar el patrimonio del Señor?
20 Joab contestó:
— ¡Líbreme Dios! ¡Líbreme Dios de arruinar y destruir! 21 No es ese el caso. Se trata de un hombre de la montaña de Efraín, llamado Sebá, hijo de Bicrí, que se ha rebelado contra el rey David. Entréguennoslo a él solo y abandonaré la ciudad.
La mujer respondió a Joab:
— Te echaremos su cabeza desde la muralla.
22 La mujer convenció a toda la gente con su sensatez: cortaron la cabeza a Sebá, el hijo de Bicrí, y se la arrojaron a Joab. Luego Joab hizo sonar el cuerno, levantaron el asedio de la ciudad y cada cual marchó a su tienda. Joab por su parte regresó a Jerusalén, junto al rey.
Read full chapterLa Palabra, (versión hispanoamericana) © 2010 Texto y Edición, Sociedad Bíblica de España