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Ancianidad de David

El rey David ya era muy anciano, entrado en días; lo cubrían de ropas pero no entraba en calor. Entonces sus siervos le dijeron: «Que se busque para mi señor el rey una joven virgen para que atienda al[a] rey y sea quien lo cuide; que ella se acueste en su seno, para que mi señor el rey entre en calor». Por toda la tierra de Israel se buscó a una joven hermosa, y hallaron a Abisag la sunamita(A) y la trajeron al rey. La joven era muy hermosa; ella cuidaba al rey y le servía, pero el rey no tuvo relaciones con ella.

Rebelión de Adonías

Entretanto Adonías, hijo de Haguit(B), se ensalzaba diciendo: «Yo seré rey». Y preparó para sí carros, hombres de a caballo y cincuenta hombres que corrieran delante de él(C). Su padre nunca lo había contrariado[b] preguntándole: «¿Por qué has hecho esto?». Él era también hombre de muy hermoso parecer, y había nacido después de Absalón(D). Y había consultado[c] con Joab, hijo de Sarvia(E), y con el sacerdote Abiatar(F), que respaldaban a Adonías(G). Pero el sacerdote Sadoc(H), Benaía, hijo de Joiada(I), el profeta Natán(J), Simei(K), Rei y los valientes que tenía David(L), no estaban con Adonías. Adonías sacrificó ovejas, bueyes y animales cebados junto a la piedra de Zohélet[d], que está al lado de En Rogel(M). Invitó a todos sus hermanos, los hijos del rey David, y a todos los hombres de Judá, siervos del rey. 10 Pero no invitó al profeta Natán, ni a Benaía, ni a los valientes, ni a Salomón su hermano(N).

11 Entonces Natán habló a Betsabé, madre de Salomón(O) y dijo: «¿No has oído que Adonías, hijo de Haguit, se ha hecho rey y que David nuestro señor no lo sabe? 12 Ahora pues, ven, voy a darte un consejo(P) para que salves tu vida y la vida de tu hijo Salomón. 13 Ve ahora mismo[e] al rey David y dile: “¿No ha jurado usted, oh rey mi señor, a su sierva, diciendo: ‘Ciertamente tu hijo Salomón será rey después de mí y se sentará en mi trono(Q)?’. ¿Por qué, pues, se ha hecho rey Adonías?”. 14 Así que mientras estés aún hablando con el rey, yo entraré tras de ti y confirmaré tus palabras».

15 Betsabé vino a ver al rey en la alcoba. El rey ya era muy anciano(R), y Abisag la sunamita le servía. 16 Entonces Betsabé se inclinó y se postró ante el[f] rey. Y el rey le preguntó: «¿Qué deseas?[g]». 17 Ella le respondió: «Mi señor, usted juró a su sierva por el Señor su Dios: “Ciertamente su hijo Salomón será rey después de mí y se sentará en mi trono(S)”. 18 Sin embargo, ahora Adonías es rey; y usted, mi señor el rey, hasta ahora no lo sabe. 19 Él ha sacrificado bueyes, animales cebados y ovejas en abundancia, y ha invitado a todos los hijos del rey(T), al sacerdote Abiatar y a Joab, jefe del ejército, pero no ha invitado a Salomón su siervo. 20 En cuanto a usted, mi señor el rey, los ojos de todo Israel están sobre usted, para que les haga saber quién ha de sentarse en el trono de mi señor el rey después de él. 21 Pues sucederá que en cuanto mi señor el rey duerma con sus padres(U), yo y mi hijo Salomón seremos tenidos por culpables[h]».

22 Sucedió que mientras ella estaba aún hablando con el rey, entró el profeta Natán. 23 Y le informaron al rey: «Aquí está el profeta Natán». Cuando este entró a la presencia del rey, se postró ante el[i] rey rostro en tierra. 24 Entonces Natán dijo: «Mi señor el rey, ¿acaso ha dicho usted: “Adonías será rey después de mí y se sentará en mi trono”? 25 Porque él ha descendido hoy y ha sacrificado bueyes, animales cebados y ovejas en abundancia, ha invitado a todos los hijos del rey, a los jefes del ejército(V) y al sacerdote Abiatar, y allí están comiendo y bebiendo en su presencia, y gritando[j]: “¡Viva el rey(W) Adonías!”. 26 Pero ni a mí, su siervo, ni al sacerdote Sadoc, ni a Benaía, hijo de Joiada, ni a su siervo Salomón ha invitado(X). 27 ¿Ha sido hecho esto por mi señor el rey, y no ha declarado a sus siervos quién había de sentarse en el trono de mi señor el rey después de él?».

Salomón escogido por David

28 Entonces el rey David respondió: «Llamen a Betsabé». Y ella entró a la presencia del rey, y se puso delante del rey. 29 Y el rey juró: «Vive el Señor, que ha redimido mi vida de toda angustia(Y), 30 que ciertamente como te juré por el Señor, Dios de Israel: “Tu hijo Salomón será rey después de mí, y él se sentará sobre mi trono en mi lugar(Z)”, así lo haré hoy mismo». 31 Betsabé se inclinó rostro en tierra, se postró ante el[k] rey y dijo: «Viva para siempre mi señor el rey David(AA)».

32 Entonces el rey David dijo: «Llamen al sacerdote Sadoc, al profeta Natán y a Benaía, hijo de Joiada(AB)». Ellos entraron a la presencia del rey, 33 y el rey les dijo: «Tomen con ustedes a los siervos de su señor(AC), hagan montar a mi hijo Salomón en mi propia mula y llévenlo a Gihón(AD). 34 Que allí el sacerdote Sadoc y el profeta Natán lo unjan como rey sobre Israel(AE); y toquen trompeta y digan(AF): “¡Viva el rey(AG) Salomón!”. 35 Después subirán tras él, y él vendrá, se sentará en mi trono y reinará en mi lugar; porque lo he escogido para que sea príncipe sobre Israel y sobre Judá». 36 Y Benaía, hijo de Joiada, respondió al rey: «¡Amén! Así lo diga también el Señor, el Dios de mi señor el rey. 37 Como el Señor ha estado con mi señor el rey(AH), así esté con Salomón, y haga su trono más grande que el trono de mi señor el rey David(AI)».

38 Entonces el sacerdote Sadoc, el profeta Natán, Benaía, hijo de Joiada(AJ), los cereteos y los peleteos(AK), descendieron e hicieron que Salomón montara en la mula del rey David, y lo llevaron a Gihón(AL). 39 El sacerdote Sadoc tomó el cuerno de aceite de la tienda(AM) y ungió a Salomón(AN). Entonces tocaron trompeta, y todo el pueblo gritó[l]: «¡Viva el rey(AO) Salomón(AP)!». 40 Luego todo el pueblo subió tras él. El pueblo tocaba flautas y se regocijaba con gran alegría, de modo que la tierra se estremecía[m] con su sonido.

41 Y lo oyó Adonías y todos los invitados que estaban con él cuando habían terminado de comer. Al oír Joab el sonido de la trompeta, dijo: «¿Por qué hace la ciudad tal alboroto?». 42 Estaba aún hablando, cuando llegó Jonatán, hijo del sacerdote Abiatar(AQ). Y Adonías le dijo: «Entra, pues tú eres hombre valiente y traerás buenas noticias(AR)». 43 Pero Jonatán respondió a Adonías: «Al contrario. Nuestro señor el rey David ha hecho rey a Salomón. 44 El rey también ha enviado con él al sacerdote Sadoc, al profeta Natán, a Benaía, hijo de Joiada, a los cereteos y a los peleteos, y ellos lo han montado en la mula del rey. 45 Y el sacerdote Sadoc y el profeta Natán lo han ungido rey en Gihón, y de allí han subido gozosos y se ha alborotado la ciudad(AS). Este es el ruido que han oído. 46 Además, Salomón ya se ha sentado en el trono del reino(AT), 47 y aun los siervos del rey han ido a bendecir a nuestro señor el rey David, diciéndole: “Que su Dios haga el nombre de Salomón más célebre[n] que su nombre y su trono más grande que el trono de usted(AU)”. Y el rey ha adorado en el lecho(AV). 48 El rey también ha dicho así: “Bendito sea el Señor, Dios de Israel, que ha concedido que se siente hoy en mi trono(AW) un descendiente mío[o] mientras mis ojos lo ven”».

49 Entonces todos los invitados de Adonías se aterrorizaron, y se levantaron y cada uno se fue por su camino. 50 Adonías tuvo miedo de Salomón, y se levantó, se fue y se agarró de los cuernos del altar(AX). 51 Y avisaron a Salomón, diciéndole: «Adonías tiene miedo del rey Salomón, y se ha asido de los cuernos del altar, diciendo: “Que el rey Salomón me jure hoy que no matará a espada a su siervo”». 52 Y Salomón dijo: «Si es hombre digno, ni uno de sus cabellos caerá en tierra(AY); pero si se halla maldad en él, morirá». 53 Entonces el rey Salomón envió que lo hicieran descender del altar. Y él vino y se postró ante el rey Salomón, y Salomón le dijo: «Vete a tu casa».

Últimas palabras de David

Y acercándose los días de su muerte, David(AZ) dio órdenes a su hijo Salomón: «Yo voy por el camino de todos en la tierra(BA). Sé, pues, fuerte(BB) y sé hombre. Guarda los mandatos del Señor tu Dios, andando en Sus caminos, guardando Sus estatutos, Sus mandamientos, Sus ordenanzas y Sus testimonios, conforme a lo que está escrito en la ley de Moisés(BC), para que prosperes(BD) en todo lo que hagas y dondequiera que vayas, para que el Señor cumpla la promesa que me hizo[p](BE): “Si tus hijos guardan su camino(BF), andando delante de Mí con fidelidad[q], con todo su corazón(BG) y con toda su alma, no te faltará[r] hombre sobre el trono de Israel(BH)”.

»También sabes lo que me hizo Joab, hijo de Sarvia(BI), lo que hizo a los dos jefes de los ejércitos de Israel, a Abner, hijo de Ner, y a Amasa(BJ), hijo de Jeter(BK), a los cuales mató; también derramó sangre de guerra en tiempo de paz. Y puso sangre de guerra en el cinturón que lo ceñía y en las sandalias que tenía en sus pies. Haz, pues, conforme a tu sabiduría, y no permitas que sus canas desciendan al Seol[s](BL) en paz. Pero muestra bondad a los hijos de Barzilai el galaadita(BM), y que estén entre los que comen a tu mesa(BN); porque ellos me ayudaron[t](BO) cuando huía de tu hermano Absalón.

»Mira, contigo está Simei, hijo de Gera, el benjamita de Bahurim(BP); él fue el que me maldijo con una terrible[u] maldición el día que yo iba a Mahanaim. Pero cuando descendió a mi encuentro en el Jordán, le juré por el Señor, diciendo: “No te mataré(BQ) a espada”. Pero ahora, no lo dejes sin castigo, porque eres hombre sabio. Sabrás lo que debes hacer con él y harás que desciendan sus canas con sangre al Seol(BR)».

10 Y durmió David con sus padres y fue sepultado(BS) en la ciudad de David(BT). 11 Los días que David reinó sobre Israel fueron cuarenta años: siete años reinó en Hebrón, y treinta y tres años reinó en Jerusalén(BU). 12 Salomón se sentó en el trono de David su padre y su reino se afianzó en gran manera(BV).

Salomón consolida su reino

13 Entonces Adonías, hijo de Haguit, vino a Betsabé, madre de Salomón; y ella le dijo: «¿Vienes en paz(BW)?». «En paz», respondió él. 14 Y añadió: «Tengo algo que decirle[v]». Y ella dijo: «Habla». 15 «Usted sabe», dijo él, «que el reino era mío(BX) y que todo Israel esperaba que yo fuera rey[w](BY); pero el reino ha cambiado de manos y ha venido a ser de mi hermano(BZ), porque por voluntad del Señor era suyo(CA). 16 Ahora yo le hago una petición, no me la niegue[x]». «Habla», le dijo ella. 17 Él entonces dijo: «Le ruego que hable al rey Salomón, pues él no se lo negará, para que me dé por mujer a Abisag la sunamita(CB)». 18 «Muy bien», dijo Betsabé, «hablaré por ti al rey».

19 Betsabé fue al rey Salomón para hablarle por Adonías. El rey se levantó a recibirla, se inclinó delante de ella, y se sentó en su trono; hizo colocar un trono para la madre del rey(CC) y ella se sentó a su diestra(CD). 20 Entonces ella dijo: «Te hago una pequeña petición; no me la niegues(CE)». «Pide, madre mía, porque no te la negaré», le dijo el rey. 21 Y ella dijo: «Que se dé a Abisag la sunamita(CF) por mujer a tu hermano Adonías». 22 El rey Salomón respondió a su madre: «¿Por qué pides a Abisag la sunamita para Adonías? Pide para él también el reino(CG), pues es mi hermano mayor(CH), y con él están el sacerdote Abiatar y Joab, hijo de Sarvia(CI)».

23 Y el rey Salomón juró por el Señor, diciendo: «Así me haga Dios y aun más, si Adonías no ha hablado esta palabra contra su propia vida[y](CJ). 24 Ahora pues, vive el Señor que me ha confirmado y me ha puesto en el trono de mi padre David, y que me ha hecho una casa[z](CK) como había prometido, que hoy mismo Adonías morirá». 25 El rey Salomón envió a[aa] Benaía, hijo de Joiada(CL), y este atacó a Adonías[ab] y lo mató[ac].

26 Entonces dijo el rey al sacerdote Abiatar: «Vete a Anatot(CM), a tu campo, porque mereces morir[ad](CN); pero no te daré muerte en esta ocasión[ae] porque llevaste el arca del Señor Dios[af] delante de mi padre David(CO), y porque fuiste afligido con todas las cosas con que mi padre fue afligido(CP)». 27 Así Salomón privó[ag] a Abiatar de ser sacerdote del Señor, para que se cumpliera la palabra que el Señor había hablado acerca de la casa de Elí(CQ) en Silo.

28 Cuando las noticias llegaron a Joab, porque Joab había seguido a Adonías(CR), aunque no había seguido a Absalón(CS), Joab huyó a la tienda del Señor y se agarró de los cuernos del altar(CT). 29 Y se le informó al rey Salomón que Joab había huido a la tienda del Señor, y que estaba junto al altar. Entonces Salomón envió a Benaía, hijo de Joiada(CU), diciendo: «Ve y atácalo(CV)».

30 Benaía entró en la tienda del Señor y le dijo: «Así ha dicho el rey: “Sal de ahí”». Pero él dijo: «No, pues moriré aquí». Benaía llevó la respuesta[ah] al rey: «Así Joab habló y así me respondió». 31 Y el rey le dijo: «Haz como él ha dicho(CW); atácalo, mátalo y entiérralo, para que quites de mí y de la casa de mi padre la sangre que Joab derramó sin causa(CX). 32 El Señor hará volver su sangre sobre su propia cabeza(CY), porque él atacó a dos hombres más justos y mejores que él y los mató(CZ) a espada sin que mi padre David lo supiera: a Abner(DA), hijo de Ner, jefe del ejército de Israel, y a Amasa(DB), hijo de Jeter, jefe del ejército de Judá. 33 Su sangre, pues, recaerá sobre la cabeza de Joab y sobre la cabeza de su descendencia[ai] para siempre(DC); pero para David y su descendencia[aj], para su casa y su trono, haya paz de parte del Señor para siempre».

34 Entonces subió Benaía, hijo de Joiada, lo atacó y lo mató(DD); y fue sepultado en su casa en el desierto(DE). 35 En su lugar el rey nombró sobre el ejército a Benaía, hijo de Joiada(DF), y el rey nombró al sacerdote Sadoc(DG) en lugar de Abiatar(DH).

36 Después el rey envió a llamar a Simei(DI), y le dijo: «Edifícate una casa en Jerusalén, vive ahí y no salgas de allí a ninguna parte. 37 Porque el día que salgas y pases el torrente Cedrón(DJ), ten por cierto que sin duda morirás; tu sangre recaerá[ak] sobre tu cabeza(DK)». 38 Entonces Simei dijo al rey: «La palabra es buena; como ha dicho el rey mi señor, así lo hará su siervo». Y vivió Simei en Jerusalén muchos días.

39 Pero aconteció que después de tres años, dos de los siervos de Simei huyeron a donde Aquis, hijo de Maaca, rey de Gat(DL). Le avisaron a Simei: «Tus siervos están en Gat». 40 Simei se levantó, ensilló su asno y fue a Gat a ver a Aquis para buscar a sus siervos. Fue, pues, Simei y trajo sus siervos de Gat. 41 Pero informaron a Salomón que Simei había ido de Jerusalén hasta Gat y había vuelto.

42 Entonces el rey envió a llamar a Simei y le dijo: «¿No te hice jurar por el Señor y te advertí seriamente: “El día que salgas y vayas a cualquier parte, ten por seguro que ciertamente morirás”? Y tú me dijiste: “La palabra que he oído es buena”. 43 ¿Por qué, entonces, no guardaste el juramento del Señor y el mandamiento que te impuse?». 44 Dijo además el rey a Simei: «Tú sabes todo el mal que hiciste a mi padre David(DM), que tú reconoces en tu corazón[al]; el Señor, pues, hará recaer tu mal sobre tu propia cabeza(DN). 45 Pero el rey Salomón será bendito, y el trono de David será firme delante del Señor para siempre(DO)». 46 Entonces el rey mandó a Benaía, hijo de Joiada, y este salió y atacó a Simei[am] y lo mató[an]. Así fue confirmado el reino en las manos de Salomón(DP).

Entonces Salomón se emparentó con Faraón, rey de Egipto, pues tomó por esposa a la hija de Faraón y la trajo a la ciudad de David(DQ) mientras acababa de edificar su casa, la casa del Señor(DR) y la muralla alrededor de Jerusalén(DS). Solo que el pueblo sacrificaba en los lugares altos(DT), porque en aquellos días aún no se había edificado casa al nombre del Señor.

Sabiduría de Salomón

(DU)Salomón amaba al Señor(DV), andando en los estatutos de su padre David(DW), aunque[ao] sacrificaba y quemaba incienso en los lugares altos. El rey fue a Gabaón(DX) a sacrificar allí, porque ese era el lugar alto principal(DY). Salomón ofreció mil holocaustos sobre ese altar. Y en Gabaón el Señor se apareció a Salomón(DZ) de noche en sueños(EA), y Dios le dijo: «Pide lo que quieras que Yo te dé(EB)».

Entonces Salomón le respondió: «Tú has mostrado gran misericordia a Tu siervo David mi padre(EC), según él anduvo delante de Ti con fidelidad, justicia y rectitud de corazón hacia Ti(ED); y has guardado para él esta gran misericordia, en que le has dado un hijo que se siente en su trono, como sucede hoy(EE). Ahora, Señor Dios mío, has hecho a Tu siervo rey en lugar de mi padre David(EF), aunque soy un muchacho(EG) y no sé cómo salir ni entrar(EH). Tu siervo está en medio de Tu pueblo al cual escogiste(EI), un pueblo inmenso que no se puede numerar ni contar por su multitud(EJ). Da, pues, a Tu siervo un corazón con entendimiento[ap] para juzgar a Tu pueblo y para discernir entre el bien y el mal(EK). Pues ¿quién será capaz de juzgar a este pueblo Tuyo tan grande[aq](EL)?».

10 Fue[ar] del agrado a los ojos del Señor que Salomón pidiera esto. 11 Y Dios le dijo: «Porque has pedido esto y no has pedido para ti larga vida[as](EM), ni has pedido para ti riquezas, ni has pedido la vida de tus enemigos, sino que has pedido para ti inteligencia para administrar[at] justicia, 12 he hecho, pues, conforme a tus palabras(EN). Te he dado un corazón sabio y entendido, de modo que no ha habido ninguno como tú antes de ti, ni se levantará ninguno como tú después de ti(EO). 13 También te he dado lo que no has pedido, tanto riquezas como gloria(EP), de modo que no habrá entre los reyes ninguno como tú en todos tus días(EQ). 14 Y si andas en Mis caminos, guardando Mis estatutos y Mis mandamientos como tu padre David anduvo, entonces prolongaré tus días(ER)».

15 Salomón se despertó y vio que había sido un sueño(ES). Entró en Jerusalén y se puso delante del arca del pacto del Señor. Ofreció holocaustos e hizo ofrendas de paz y también dio un banquete para todos sus siervos(ET).

16 Por ese tiempo dos mujeres que eran rameras, vinieron al rey y se presentaron delante de él. 17 Y una de las mujeres dijo: «Oh, mi señor, yo y esta mujer vivimos en la misma casa; y yo di a luz estando con ella en la casa. 18 Y sucedió que al tercer día después de dar yo a luz, esta mujer también dio a luz; estábamos juntas, nadie de fuera estaba con nosotras en la casa, solamente nosotras dos. 19 Y el hijo de esta mujer murió durante la noche, porque ella se durmió sobre él. 20 Entonces ella se levantó a medianoche, tomó a mi hijo de mi lado mientras su sierva estaba dormida y lo puso en su regazo[au], y a su hijo muerto lo puso en mi regazo[av]. 21 Cuando me levanté al amanecer para dar el pecho a mi hijo, vi que estaba muerto; pero cuando lo observé con cuidado por la mañana, vi que no era mi hijo, el que yo había dado a luz». 22 Entonces la otra mujer dijo: «No, pues mi hijo es el que vive y tu hijo es el muerto». Pero la primera mujer dijo[aw]: «No, tu hijo es el muerto y mi hijo es el que vive». Así hablaban ellas delante del rey.

23 Entonces el rey dijo: «Esta dice: “Este es mi hijo que está vivo y tu hijo es el muerto”; y la otra dice: “No, porque tu hijo es el muerto y mi hijo es el que vive”». 24 Y el rey dijo: «Tráiganme una espada». Y trajeron una espada al rey. 25 Entonces el rey dijo: «Partan al niño vivo en dos, y den la mitad a una y la otra mitad a la otra». 26 Entonces la mujer de quien era el niño vivo habló al rey, pues estaba profundamente conmovida[ax](EU) por su hijo, y dijo: «Oh, mi señor, déle a ella el niño vivo, y de ninguna manera lo mate». Pero la otra decía: «No será ni mío ni tuyo; pártanlo». 27 Entonces el rey respondió: «Den el niño vivo a la primera mujer[ay], y de ninguna manera lo maten. Ella es la madre». 28 Cuando todo Israel oyó del juicio que el rey había pronunciado[az], temieron al rey, porque vieron que la sabiduría de Dios estaba en él para administrar justicia(EV).

Oficiales del gobierno de Salomón

El rey Salomón fue rey sobre todo Israel, y estos eran sus oficiales: Azarías, hijo de Sadoc, era el sacerdote(EW); Elihoref y Ahías, hijos de Sisa, eran secretarios; Josafat, hijo de Ahilud, era el cronista[ba](EX); Benaía, hijo de Joiada, estaba sobre el ejército; y Sadoc y Abiatar eran sacerdotes(EY); Azarías, hijo de Natán, estaba sobre los oficiales[bb](EZ); y Zabud, hijo de Natán, un sacerdote, era amigo del rey; Ahisar, era el mayordomo; y Adoniram, hijo de Abda, estaba sobre los hombres que hacían trabajos forzados.

Salomón tenía doce oficiales sobre todo Israel, los cuales abastecían[bc] al rey y a su casa. Cada uno tenía que hacerlo[bd] un mes en el año. Y estos son sus nombres: Ben[be] Hur, en la región montañosa de Efraín(FA); Ben Decar en Macaz, en Saalbim(FB), en Bet Semes(FC) y en Elón Bet Hanán; 10 Ben Hesed en Arubot (de él eran Soco(FD) y toda la tierra de Hefer(FE)); 11 Ben Abinadab, en toda la altura de Dor[bf](FF) (Tafat, hija de Salomón, era su mujer); 12 Baana, hijo de Ahilud, en Taanac(FG) y Meguido y todo Bet Seán(FH), que está junto a Saretán(FI), más abajo de Jezreel, desde Bet Seán hasta Abel Mehola(FJ), hasta el otro lado de Jocmeam(FK);

13 Ben Geber en Ramot de Galaad(FL) (las aldeas de Jair, hijo de Manasés(FM), que están en Galaad eran de él: la región de Argob que está en Basán(FN), sesenta ciudades grandes con muros y cerrojos[bg] de bronce eran de él); 14 Ahinadab, hijo de Iddo, en Mahanaim(FO); 15 Ahimaas(FP) en Neftalí (también se casó con Basemat, hija de Salomón); 16 Baana, hijo de Husai(FQ), en Aser y Bealot[bh]; 17 Josafat, hijo de Parúa, en Isacar; 18 Simei(FR), hijo de Ela, en Benjamín; 19 Geber, hijo de Uri, en la tierra de Galaad, la región de Sehón, rey de los amorreos, y de Og, rey de Basán(FS); él era el único gobernador que estaba en aquella[bi] tierra.

20 Judá e Israel eran tan numerosos como la arena que está en abundancia a la orilla del mar(FT); comían, bebían y se alegraban.

Poder, riqueza y sabiduría de Salomón

21 [bj]Salomón gobernaba todos los reinos desde el Río[bk] hasta la tierra de los filisteos y hasta la frontera de Egipto(FU). Ellos trajeron tributo y sirvieron a Salomón todos los días de su vida(FV). 22 La provisión[bl] de Salomón para un día era de 30 coros[bm] (6,600 litros) de flor de harina y 60 coros (13,200 litros) de harina, 23 diez bueyes cebados, veinte bueyes de pasto y cien ovejas, sin contar los ciervos, gacelas, corzos y aves cebadas. 24 Porque Salomón tenía dominio sobre todos los reinos al oeste[bn] del Río[bo], desde Tifsa hasta Gaza(FW), sobre todos los reyes(FX) al oeste del Río; y tuvo paz por todos lados a su alrededor(FY). 25 Y Judá e Israel vivieron seguros, cada uno bajo su parra y bajo su higuera(FZ), desde Dan hasta Beerseba(GA), todos los días de Salomón.

26 Salomón tenía 40,000 establos de caballos para sus carros y 12,000 jinetes(GB). 27 Y los gobernadores abastecían[bp], cada uno un[bq] mes, al rey Salomón y a todos los que venían a la mesa del rey Salomón. No dejaban que faltara nada. 28 También llevaban, cada uno según su obligación, cebada y paja para los caballos de tiro y los corceles(GC) al lugar donde debieran estar.

29 Dios dio a Salomón sabiduría, gran discernimiento y amplitud de corazón(GD) como la arena que está a la orilla del mar(GE). 30 Y la sabiduría de Salomón sobrepasó la sabiduría de todos los hijos del oriente(GF) y toda la sabiduría de Egipto(GG). 31 Porque era más sabio que todos los hombres(GH), más que Etán(GI) el ezraíta, Hemán, Calcol y Darda[br](GJ), hijos de Mahol; y su fama[bs] fue conocida por todas las naciones de alrededor. 32 También pronunció 3,000 proverbios, y sus cantares(GK) fueron 1,005. 33 Disertó sobre los árboles, desde el cedro que está en el Líbano hasta el hisopo que crece en la pared. También habló de ganados, aves, reptiles y peces. 34 Y venían de todos los pueblos para oír la sabiduría de Salomón, de parte de todos los reyes de la tierra que habían oído de su sabiduría(GL).

Footnotes

  1. 1:2 Lit. esté delante del.
  2. 1:6 Lit. lastimado.
  3. 1:7 Lit. sus palabras eran.
  4. 1:9 I.e. piedra de la serpiente.
  5. 1:13 Lit. y entra.
  6. 1:16 Lit. al.
  7. 1:16 Lit. ¿Qué a ti?
  8. 1:21 Lit. pecadores.
  9. 1:23 Lit. al.
  10. 1:25 Lit. dicen.
  11. 1:31 Lit. al.
  12. 1:39 Lit. dijo.
  13. 1:40 Lit. se hendía.
  14. 1:47 Lit. mejor.
  15. 1:48 Así en la versión gr. (sept.); el T.M. omite: un descendiente mío.
  16. 2:4 Lit. su palabra que habló de mí.
  17. 2:4 O verdad.
  18. 2:4 Lit. diciendo: no te será cortado.
  19. 2:6 I.e. región de los muertos.
  20. 2:7 Lit. se me acercaron.
  21. 2:8 O dolorosa.
  22. 2:14 Lit. palabra para ti.
  23. 2:15 Lit. ponía su rostro en mí para reinar.
  24. 2:16 Lit. no hagas (hará) volver mi (tu) rostro, y así en los vers. 17 y 20.
  25. 2:23 Lit. alma.
  26. 2:24 I.e. una dinastía.
  27. 2:25 Lit. envió por mano de.
  28. 2:25 Lit. él.
  29. 2:25 Lit. y murió.
  30. 2:26 Lit. eres hombre de muerte.
  31. 2:26 Lit. este día.
  32. 2:26 Heb. YHWH, generalmente traducido Señor.
  33. 2:27 Lit. expulsó.
  34. 2:30 Lit. palabra.
  35. 2:33 Lit. simiente.
  36. 2:33 Lit. simiente.
  37. 2:37 Lit. será.
  38. 2:44 Lit. que tu corazón reconoce.
  39. 2:46 Lit. él.
  40. 2:46 Lit. y murió.
  41. 3:3 Lit. solamente.
  42. 3:9 Lit. que oiga.
  43. 3:9 Lit. pesado.
  44. 3:10 Lit. El asunto fue.
  45. 3:11 Lit. muchos días.
  46. 3:11 Lit. oír.
  47. 3:20 O junto a ella.
  48. 3:20 O junto a mí.
  49. 3:22 Lit. esta estaba diciendo.
  50. 3:26 Lit. su compasión se encendió.
  51. 3:27 Lit. a ella.
  52. 3:28 Lit. juzgado.
  53. 4:3 O canciller.
  54. 4:5 O capataces.
  55. 4:7 O alimentaban.
  56. 4:7 O alimentar.
  57. 4:8 I.e. hijo de, y así en el resto del cap.
  58. 4:11 O Nafat-dor.
  59. 4:13 Lit. barras.
  60. 4:16 O en Alot.
  61. 4:19 Lit. la.
  62. 4:21 En el texto heb. cap. 5:1.
  63. 4:21 I.e. Éufrates.
  64. 4:22 Lit. El pan.
  65. 4:22 Un coro equivale aprox. a 220 litros.
  66. 4:24 Lit. más allá.
  67. 4:24 I.e. Éufrates.
  68. 4:27 O alimentaban.
  69. 4:27 Lit. su.
  70. 4:31 En 1Crón. 2:6: Dara.
  71. 4:31 Lit. nombre.