Add parallel Print Page Options

La lámpara del cuerpo

33 »Nadie enciende una lámpara y luego la esconde o la pone debajo de una canasta.[a] En cambio, una lámpara se coloca en un lugar alto donde todos los que entren en la casa puedan ver su luz.

34 »Tu ojo es como una lámpara que da luz a tu cuerpo. Cuando tu ojo está sano, todo tu cuerpo está lleno de luz; pero cuando tu ojo está enfermo, tu cuerpo está lleno de oscuridad. 35 Asegúrate de que la luz que crees tener no sea en realidad oscuridad. 36 Si estás lleno de luz, sin rincones oscuros, entonces toda tu vida será radiante, como si un reflector te llenara con su luz».

Jesús critica a los líderes religiosos

37 Mientras Jesús hablaba, uno de los fariseos lo invitó a comer en su casa. Jesús fue y se sentó a la mesa.[b] 38 Su anfitrión se sorprendió de que se sentara a la mesa sin antes realizar la ceremonia de lavarse las manos que exigía la costumbre judía. 39 Entonces el Señor le dijo: «Ustedes, los fariseos, son tan cuidadosos para limpiar la parte exterior de la taza y del plato pero están sucios por dentro, ¡llenos de avaricia y de perversidad! 40 ¡Necios! ¿No hizo Dios tanto el interior como el exterior? 41 Por lo tanto, limpien el interior dando de sus bienes a los pobres, y quedarán completamente limpios.

42 »¡Qué aflicción les espera, fariseos! Pues se cuidan de dar el diezmo sobre el más mínimo ingreso de sus jardines de hierbas,[c] pero pasan por alto la justicia y el amor de Dios. Es cierto que deben diezmar, pero sin descuidar las cosas más importantes.

43 »¡Qué aflicción les espera, fariseos! Pues les encanta ocupar los asientos de honor en las sinagogas y recibir saludos respetuosos cuando caminan por las plazas. 44 ¡Sí, qué aflicción les espera! Pues son como tumbas escondidas en el campo. Las personas caminan sobre ellas sin saber de la corrupción que están pisando».

45 —Maestro—le dijo un experto en la ley religiosa—, nos has insultado a nosotros también con lo que has dicho.

46 —Sí—dijo Jesús—, ¡qué aflicción les espera también a ustedes, expertos en la ley religiosa! Pues aplastan a la gente bajo el peso de exigencias religiosas insoportables y jamás mueven un dedo para aligerar la carga. 47 ¡Qué aflicción les espera! Pues levantan monumentos a los profetas que sus propios antepasados mataron tiempo atrás. 48 Por lo cual, ustedes quedan como testigos que aprueban lo que hicieron sus antepasados. Ellos mataron a los profetas, ¡y ustedes se convierten en cómplices al edificar los monumentos! 49 Esto es lo que Dios en su sabiduría dijo acerca de ustedes:[d] “Les enviaré profetas y apóstoles, pero ellos matarán a unos y perseguirán a otros”.

50 »Como consecuencia, a esta generación se le hará responsable del asesinato de todos los profetas de Dios desde la creación del mundo, 51 desde el asesinato de Abel hasta el de Zacarías, a quien mataron entre el altar y el santuario. Sí, de verdad se culpará a esta generación.

52 »¡Qué aflicción les espera a ustedes, expertos en la ley religiosa! Pues le quitan a la gente la llave del conocimiento. Ustedes mismos no entran al reino e impiden que otros entren.

53 Mientras Jesús se retiraba, los maestros de la ley religiosa y los fariseos se pusieron agresivos y trataron de provocarlo con muchas preguntas. 54 Querían tenderle una trampa para que dijera algo que pudieran usar en su contra.

Read full chapter

Footnotes

  1. 11:33 Algunos manuscritos no incluyen o la pone debajo de una canasta.
  2. 11:37 O se reclinó.
  3. 11:42 En griego sobre la menta, la ruda y cada hierba.
  4. 11:49 En griego Por lo tanto, la sabiduría de Dios dijo.

Bible Gateway Recommends