Jesús, el gran Sumo Sacerdote

14 Teniendo, pues, un gran Sumo Sacerdote(A) que trascendió[a](B) los cielos, Jesús, el Hijo de Dios(C), retengamos nuestra fe[b](D). 15 Porque no tenemos un sumo sacerdote(E) que no pueda compadecerse de nuestras flaquezas, sino uno que ha sido tentado en todo como nosotros(F), pero sin pecado(G). 16 Por tanto, acerquémonos(H) con confianza(I) al trono de la gracia para que recibamos misericordia, y hallemos gracia para la ayuda oportuna.

Read full chapter

Footnotes

  1. Hebreos 4:14 Lit., pasó a través de
  2. Hebreos 4:14 O, confesión, o, profesión

Jesús el gran sumo sacerdote

14 Por tanto, teniendo un gran sumo sacerdote que traspasó los cielos, Jesús el Hijo de Dios, retengamos nuestra profesión. 15 Porque no tenemos un sumo sacerdote que no pueda compadecerse de nuestras debilidades, sino uno que fue tentado en todo según nuestra semejanza, pero sin pecado. 16 Acerquémonos, pues, confiadamente al trono de la gracia, para alcanzar misericordia y hallar gracia para el oportuno socorro.

Read full chapter