¹² Y envió Jefté mensajeros al rey de los amonitas para que le dijeran: «¿Qué hay entre usted y yo^[a], que ha venido a mí para pelear contra mi tierra?».

¹⁰ Pero el rey dijo: «¿Qué tengo yo que ver con ustedes, hijos de Sarvia? Si él maldice^(A), y si el Señor le ha dicho^(B): “Maldice a David”, ¿quién, pues, le dirá: “¿Por qué has hecho esto^(C)?”».

²² Entonces David dijo: «¿Qué tengo yo que ver con ustedes, hijos de Sarvia^(A), para que en este día me sean adversarios? ¿Ha de morir hoy hombre alguno en Israel^(B)? ¿Acaso no sé que hoy soy rey sobre Israel?».

¹⁸ Y ella le dijo a Elías: «¿Qué tengo que ver contigo^(A), oh hombre de Dios^(B)? ¡Has venido para traer a memoria mis iniquidades y hacer morir a mi hijo!».

¹³ Entonces Eliseo dijo al rey de Israel: «¿Qué tengo que ver con usted? Vaya a los profetas de su padre y a los profetas de su madre^(A)». Y el rey de Israel le dijo: «No, porque el Señor ha llamado a estos tres reyes para entregarlos en mano de Moab».

²¹ Pero Necao le envió mensajeros, diciéndole: «¿Qué tenemos que ver el uno con el otro, oh rey de Judá? No vengo hoy contra ti, sino contra la casa con la que estoy en guerra, y Dios me ha ordenado que me apresure. Por tu propio bien, deja de oponerte a Dios, que está conmigo, para que Él no te destruya^(A)».

²⁴ «¿Qué tienes que ver con nosotros^[a](A), Jesús de Nazaret^[b](B)? ¿Has venido a destruirnos? Yo sé quien Tú eres: el Santo de Dios^(C)».

⁷ y gritando a gran voz, dijo*: «¿Qué tengo yo que ver contigo^[a], Jesús, Hijo del Dios^(A) Altísimo^(B)? Te imploro por Dios que no me atormentes^(C)».

³⁴ «Déjanos. ¿Qué tienes que ver con nosotros^[a](A), Jesús de Nazaret^[b]? ¿Has venido a destruirnos? Yo sé quién Tú eres: el Santo de Dios^(B)».

²⁸ Al ver a Jesús, gritó y cayó delante de Él, y dijo en alta voz: «¿Qué tienes Tú que ver conmigo^[a], Jesús, Hijo del Dios^(A) Altísimo? Te ruego que no me atormentes^(B)».