Add parallel Print Page Options

Son como caballos bien cebados y fogosos;
    todos relinchan por la mujer ajena.
¿Y no los he de castigar por esto?
    —afirma el Señor—.
¿Acaso no he de vengarme de semejante nación?

10 »Subid por los surcos de esta viña
    y arrasadla, pero no acabéis con ella.
Arrancadle sus sarmientos,
    porque no son del Señor.

Read full chapter