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Advertencia a Samaria

28 ¡Ay de Samaria, orgullo y corona
de Efraín, ese pueblo borracho;
adorno glorioso de flores marchitas,
que se alza por encima del fértil valle,
ciudad de gente dominada por el vino!
El Señor tiene reservado un hombre fuerte,
poderoso como tormenta de granizo,
como tempestad destructora, como lluvia torrencial,
como terrible inundación.
Con la mano echará por tierra,
y con los pies aplastará,
a la que es orgullo y corona
de ese pueblo borracho de Efraín.
Y ese adorno glorioso de flores marchitas
que se alza por encima del fértil valle,
será como los primeros higos de la temporada:
que en cuanto alguien los ve
y los tiene a la mano, se los come.

En ese día
el Señor todopoderoso será una corona gloriosa,
un adorno magnífico para los que queden de su pueblo,
e inspirará justicia a los jueces en el tribunal
y valor a los soldados que defiendan la ciudad.

Advertencias y promesas a Jerusalén

También hay otros que se tambalean por el vino
y dan traspiés por las bebidas fuertes:
sacerdotes y profetas se tambalean
por las bebidas fuertes,
se atontan con el vino;
dan traspiés por las bebidas fuertes,
se tambalean al tener visiones
y están borrachos al dictar sentencia.
Todas las mesas están llenas de vómito asqueroso,
y no hay un solo lugar limpio.
Hablan de mí y dicen:
«¡Venir a darnos lecciones a nosotros,
a enseñarnos lo que Dios ha revelado!
¡Como si fuéramos niños chiquitos
10 que apenas estuvieran aprendiendo a leer:
ba be bi bo bu!»
11 Pues bien, si no hacen caso,
será en lenguaje enredado, en idioma extraño,
como Dios hablará a este pueblo.
12 Ya él les había dicho antes:
«Aquí está la calma,
aquí está el descanso;
que descanse el fatigado.»
Pero no quisieron hacerle caso.
13 Por eso el Señor les hablará
como si fueran niños chiquitos
que estuvieran aprendiendo a leer.
Y así, al caminar, caerán de espaldas,
se herirán, caerán en la trampa,
quedarán atrapados.

14 Escuchen, pues, la palabra del Señor,
hombres insolentes
que gobiernan este pueblo de Jerusalén.
15 Ustedes dicen:
«Hemos hecho un pacto con la muerte,
un contrato con el reino de los muertos,
para que cuando venga la terrible calamidad,
no nos alcance;
hemos buscado refugio en las mentiras,
protección en el engaño.»

16 Por eso, el Señor dice:
«Voy a poner en Sión una piedra,
una piedra escogida y muy valiosa,
que será la piedra principal
y servirá de fundamento.
El que tenga confianza, podrá estar tranquilo.
17 En esa construcción usaré por plomada la justicia
y por nivel la rectitud.»

El refugio que ustedes habían buscado en las mentiras
lo destruirá el granizo,
y el agua arrasará su lugar de protección.
18 Su pacto con la muerte será anulado,
y su contrato con el reino de los muertos quedará sin valor.
Vendrá la terrible calamidad
y a ustedes los aplastará.
19 Cada vez que venga, los arrastrará.
Vendrá mañana tras mañana, de día y de noche.
El sólo oír la noticia los hará temblar.
20 Será como acostarse en una cama estrecha
y abrigarse con una manta corta.
21 El Señor actuará como en el monte Perasim,
intervendrá como en el valle de Gabaón,
para realizar su acción, por extraña que parezca,
para llevar a cabo su obra, su obra misteriosa.
22 Así pues, ¡no más insolencia!,
no sea que sus cadenas se les aprieten más;
porque he oído que el Señor todopoderoso
ha decretado la destrucción de todo el país.

23 Pongan atención, escuchen lo que digo,
oigan con cuidado mis palabras:
24 Cuando un agricultor va a sembrar,
no se pasa todo el tiempo arando
o rompiendo o rastrillando su terreno.
25 ¿No es verdad que, después de haberlo aplanado,
esparce semillas de eneldo o comino,
y que luego siembra trigo en hileras,
y que en los bordes siembra cebada y centeno?
26 Dios le enseña cómo debe hacerlo.
27 Porque el eneldo no se trilla,
ni se hace rodar sobre el comino una carreta;
sino que el eneldo se sacude con un palo
y el comino con una vara.
28 El trigo se trilla, si, pero no sin parar;
se hacen pasar las ruedas de la carreta
y se separa el grano, pero sin machacarlo.
29 Así también hace sus planes el Señor todopoderoso.
Él tiene planes admirables,
y los lleva a cabo con gran sabiduría.

29 ¡Ay de Ariel, Ariel,
la ciudad donde acampó David!
Que pasen unos cuantos años
con sus series de fiestas,
y yo pondré a Ariel en apuros,
y habrá llanto y gemidos.
La ciudad será para mí realmente como Ariel.
Enviaré mi ejército para que te rodee,
pondré un cerco de fortalezas en tu derredor
y levantaré trincheras para atacarte.
Quedarás humillada, tendida en el suelo;
tu voz parecerá la de un fantasma;
tus palabras sonarán como un susurro.
5-6 Pero de repente, en un instante,
el Señor todopoderoso castigará a tus enemigos
con truenos, terremotos, gran estruendo,
tormenta, tempestad e incendios destructores.
Tus innumerables enemigos quedarán hechos polvo fino,
tus muchos perseguidores serán arrastrados como paja.
Todos esos pueblos incontables
que hacen la guerra a Ariel,
todos los que lo combaten
y atacan sus fortificaciones,
los mismos que lo oprimen,
serán como un sueño o una visión nocturna.
Será como cuando un hambriento sueña
y cree que está comiendo,
pero luego se despierta con el estómago vacío;
o como cuando un sediento sueña
y cree que está bebiendo,
pero luego se despierta con sed
y con la garganta reseca.
Así sucederá con todos esos innumerables pueblos
que atacan el monte Sión.

¡Sigan ustedes siendo estúpidos!
¡Sigan siendo ciegos, sin ver nada!
¡Sigan tambaleándose como borrachos,
aunque no hayan tomado bebidas embriagantes!
10 Pues el Señor ha enviado sobre ustedes
un sueño profundo.
Los profetas son los ojos del pueblo,
pero el Señor los ha cubierto con un velo.
11 Toda visión se ha convertido para ustedes
en algo así como lo escrito
en un pliego enrollado y sellado.
Si alguien se lo da a uno que sabe leer
y le dice: «Lee esto»,
él responderá:
«No puedo, porque está sellado.»
12 Y si se lo da a uno que no sabe leer
y le dice: «Lee esto»,
él responderá: «No sé leer.»

13 El Señor me dijo:
«Este pueblo me sirve de palabra
y me honra con la boca,
pero su corazón está lejos de mí,
y el culto que me rinde
son cosas inventadas por los hombres
y aprendidas de memoria.
14 Por eso, con prodigios y milagros
dejaré otra vez maravillado a este pueblo.
La sabiduría de sus sabios
y la inteligencia de sus inteligentes desaparecerán.»

15 ¡Ay de aquellos que se esconden del Señor
para ocultar sus planes,
que hacen sus maldades en la sombra
y dicen: «Nadie nos ve. Nadie se da cuenta»!
16 ¡Qué modo de pervertir las cosas!
Como si el barro fuera igual
a aquel que lo trabaja.
Un objeto no va a decir al que lo hizo:
«Tú no me hiciste»,
ni una pieza de barro al que la fabrica:
«No sabes lo que estás haciendo.»

Promesa de salvación a Israel

17 Dentro de poco tiempo
el bosque se convertirá en campos de cultivo
y los campos de cultivo parecerán un bosque.
18 En ese día los sordos podrán oír
cuando alguien les lea,
y los ciegos podrán ver,
libres de oscuridad y de tinieblas.
19 Los humildes volverán a alegrarse en el Señor,
los más pobres se gozarán
en el Dios Santo de Israel.
20 Se acabarán los insolentes,
dejarán de existir los arrogantes
y desaparecerán los que sólo piensan en hacer el mal,
21 esos que acusan de crímenes a otros,
y ponen trampas al juez,
y con engaños niegan justicia al inocente.

22 Por eso, el Señor, el Dios de Israel,
el que rescató a Abraham, dice:
«De ahora en adelante Jacob no sentirá vergüenza,
ni su rostro se enrojecerá,
23 porque cuando sus descendientes
vean lo que he hecho en su pueblo,
reconocerán mi santidad y me temerán a mí,
el Dios Santo de Israel.
24 Los que estaban confundidos aprenderán a ser sabios,
y los murmuradores aceptarán las enseñanzas.»

Condenación de Efraín

28 ¡Ay de la corona de soberbia de los ebrios de Efraín, y de la flor caduca de la hermosura de su gloria, que está sobre la cabeza del valle fértil de los aturdidos del vino! He aquí, Jehová tiene uno que es fuerte y poderoso; como turbión de granizo y como torbellino trastornador, como ímpetu de recias aguas que inundan, con fuerza derriba a tierra. Con los pies será pisoteada la corona de soberbia de los ebrios de Efraín. Y será la flor caduca de la hermosura de su gloria que está sobre la cabeza del valle fértil, como la fruta temprana, la primera del verano, la cual, apenas la ve el que la mira, se la traga tan luego como la tiene a mano.

En aquel día Jehová de los ejércitos será por corona de gloria y diadema de hermosura al remanente de su pueblo; y por espíritu de juicio al que se sienta en juicio, y por fuerzas a los que rechacen la batalla en la puerta.

Pero también estos erraron con el vino, y con sidra se entontecieron; el sacerdote y el profeta erraron con sidra, fueron trastornados por el vino; se aturdieron con la sidra, erraron en la visión, tropezaron en el juicio. Porque toda mesa está llena de vómito y suciedad, hasta no haber lugar limpio. ¿A quién se enseñará ciencia, o a quién se hará entender doctrina? ¿A los destetados?, ¿a los arrancados de los pechos? 10 Porque mandamiento tras mandamiento, mandato sobre mandato, renglón tras renglón, línea sobre línea, un poquito allí, otro poquito allá; 11 porque en lengua de tartamudos, y en extraña lengua hablará a este pueblo, 12 a los cuales él dijo: Este es el reposo; dad reposo al cansado; y este es el refrigerio; mas no quisieron oír.(A) 13 La palabra, pues, de Jehová les será mandamiento tras mandamiento, mandato sobre mandato, renglón tras renglón, línea sobre línea, un poquito allí, otro poquito allá; hasta que vayan y caigan de espaldas, y sean quebrantados, enlazados y presos.

Amonestación a Jerusalén

14 Por tanto, varones burladores que gobernáis a este pueblo que está en Jerusalén, oíd la palabra de Jehová. 15 Por cuanto habéis dicho: Pacto tenemos hecho con la muerte, e hicimos convenio con el Seol; cuando pase el turbión del azote, no llegará a nosotros, porque hemos puesto nuestro refugio en la mentira, y en la falsedad nos esconderemos; 16 por tanto, Jehová el Señor dice así: He aquí que yo he puesto en Sion por fundamento una piedra, piedra probada, angular, preciosa, de cimiento estable; el que creyere, no se apresure.(B) 17 Y ajustaré el juicio a cordel, y a nivel la justicia; y granizo barrerá el refugio de la mentira, y aguas arrollarán el escondrijo. 18 Y será anulado vuestro pacto con la muerte, y vuestro convenio con el Seol no será firme; cuando pase el turbión del azote, seréis de él pisoteados. 19 Luego que comience a pasar, él os arrebatará; porque de mañana en mañana pasará, de día y de noche; y será ciertamente espanto el entender lo oído. 20 La cama será corta para poder estirarse, y la manta estrecha para poder envolverse. 21 Porque Jehová se levantará como en el monte Perazim,(C) como en el valle de Gabaón(D) se enojará; para hacer su obra, su extraña obra, y para hacer su operación, su extraña operación. 22 Ahora, pues, no os burléis, para que no se aprieten más vuestras ataduras; porque destrucción ya determinada sobre toda la tierra he oído del Señor, Jehová de los ejércitos.

23 Estad atentos, y oíd mi voz; atended, y oíd mi dicho. 24 El que ara para sembrar, ¿arará todo el día? ¿Romperá y quebrará los terrones de la tierra? 25 Cuando ha igualado su superficie, ¿no derrama el eneldo, siembra el comino, pone el trigo en hileras, y la cebada en el lugar señalado, y la avena en su borde apropiado? 26 Porque su Dios le instruye, y le enseña lo recto; 27 que el eneldo no se trilla con trillo, ni sobre el comino se pasa rueda de carreta; sino que con un palo se sacude el eneldo, y el comino con una vara. 28 El grano se trilla; pero no lo trillará para siempre, ni lo comprime con la rueda de su carreta, ni lo quebranta con los dientes de su trillo. 29 También esto salió de Jehová de los ejércitos, para hacer maravilloso el consejo y engrandecer la sabiduría.

Ariel y sus enemigos

29 ¡Ay de Ariel, de Ariel, ciudad donde habitó David! Añadid un año a otro, las fiestas sigan su curso. Mas yo pondré a Ariel en apretura, y será desconsolada y triste; y será a mí como Ariel. Porque acamparé contra ti alrededor, y te sitiaré con campamentos, y levantaré contra ti baluartes. Entonces serás humillada, hablarás desde la tierra, y tu habla saldrá del polvo; y será tu voz de la tierra como la de un fantasma, y tu habla susurrará desde el polvo. Y la muchedumbre de tus enemigos será como polvo menudo, y la multitud de los fuertes como tamo que pasa; y será repentinamente, en un momento. Por Jehová de los ejércitos serás visitada con truenos, con terremotos y con gran ruido, con torbellino y tempestad, y llama de fuego consumidor. Y será como sueño de visión nocturna la multitud de todas las naciones que pelean contra Ariel, y todos los que pelean contra ella y su fortaleza, y los que la ponen en apretura. Y les sucederá como el que tiene hambre y sueña, y le parece que come, pero cuando despierta, su estómago está vacío; o como el que tiene sed y sueña, y le parece que bebe, pero cuando despierta, se halla cansado y sediento; así será la multitud de todas las naciones que pelearán contra el monte de Sion.

Ceguera e hipocresía de Israel

Deteneos y maravillaos; ofuscaos y cegaos; embriagaos, y no de vino; tambalead, y no de sidra. 10 Porque Jehová derramó sobre vosotros espíritu de sueño, y cerró los ojos(E) de vuestros profetas, y puso velo sobre las cabezas de vuestros videntes. 11 Y os será toda visión como palabras de libro sellado, el cual si dieren al que sabe leer, y le dijeren: Lee ahora esto; él dirá: No puedo, porque está sellado. 12 Y si se diere el libro al que no sabe leer, diciéndole: Lee ahora esto; él dirá: No sé leer.

13 Dice, pues, el Señor: Porque este pueblo se acerca a mí con su boca, y con sus labios me honra, pero su corazón está lejos de mí,(F) y su temor de mí no es más que un mandamiento de hombres que les ha sido enseñado; 14 por tanto, he aquí que nuevamente excitaré yo la admiración de este pueblo con un prodigio grande y espantoso; porque perecerá la sabiduría de sus sabios, y se desvanecerá la inteligencia de sus entendidos.(G)

15 ¡Ay de los que se esconden de Jehová, encubriendo el consejo, y sus obras están en tinieblas, y dicen: ¿Quién nos ve, y quién nos conoce?! 16 Vuestra perversidad ciertamente será reputada como el barro del alfarero. ¿Acaso la obra dirá de su hacedor: No me hizo? ¿Dirá la vasija de aquel que la ha formado: No entendió?

Redención de Israel

17 ¿No se convertirá de aquí a muy poco tiempo el Líbano en campo fructífero, y el campo fértil será estimado por bosque? 18 En aquel tiempo los sordos oirán las palabras del libro, y los ojos de los ciegos verán en medio de la oscuridad y de las tinieblas. 19 Entonces los humildes crecerán en alegría en Jehová, y aun los más pobres de los hombres se gozarán en el Santo de Israel. 20 Porque el violento será acabado, y el escarnecedor será consumido; serán destruidos todos los que se desvelan para hacer iniquidad, 21 los que hacen pecar al hombre en palabra; los que arman lazo al que reprendía en la puerta, y pervierten la causa del justo con vanidad.

22 Por tanto, Jehová, que redimió a Abraham, dice así a la casa de Jacob: No será ahora avergonzado Jacob, ni su rostro se pondrá pálido; 23 porque verá a sus hijos, obra de mis manos en medio de ellos, que santificarán mi nombre; y santificarán al Santo de Jacob, y temerán al Dios de Israel. 24 Y los extraviados de espíritu aprenderán inteligencia, y los murmuradores aprenderán doctrina.

Ay de Efraín

28 ¡Ay de la altiva corona de los borrachos de Efraín,
    de la flor marchita de su gloriosa hermosura,
que está sobre la cumbre de un valle fértil!
    ¡Ay de los abatidos por el vino!
Miren, el Señor cuenta con alguien
    que es fuerte y poderoso:
Este echará todo por tierra con violencia,
    como tormenta de granizo,
    como tempestad destructora,
    como tormenta de aguas torrenciales,
    como torrente desbordado.
La altiva corona de los borrachos de Efraín
    será pisoteada.
Esa flor marchita de su gloriosa hermosura,
    sobre la cumbre de un valle fértil,
será como higo maduro antes de la cosecha:
    apenas alguien lo ve y lo tiene en la mano,
    se lo traga.

En aquel día el Señor de los Ejércitos
    será una hermosa corona,
una diadema gloriosa
    para el remanente de su pueblo.
Él infundirá espíritu de justicia
    al que se sienta en el tribunal,
y fortaleza a los que rechazan
    los asaltos a la puerta.

También sacerdotes y profetas
    se tambalean por causa del vino,
    trastabillan por causa del licor;
quedan aturdidos con el vino,
    tropiezan a causa del licor.
Cuando tienen visiones, titubean;
    cuando toman decisiones, vacilan.
¡Sí, regadas de vómito están todas las mesas,
    y no queda limpio ni un solo lugar!

«¿A quién cree el Señor que enseña? —se preguntan—,
    ¿a quién está explicando su mensaje?
¿Cree que somos niños recién destetados,
    que acaban de dejar el pecho?
10 ¿Por qué nos repite todo,
    línea por línea,
    palabra por palabra,
    un poquito aquí, un poquito allá?».[a]

11 Pues bien, Dios hablará a este pueblo
    con labios extranjeros y lenguas extrañas,
12 pueblo al que dijo:
    «Este es el lugar de descanso;
    que descanse el fatigado»;
y también:
    «Este es el lugar de reposo».
    ¡Pero no quisieron escuchar!
13 Por eso el Señor les explicará con detalles,
    línea por línea,
    palabra por palabra,
    un poquito aquí, un poquito allá.
Les hablará para que caigan de espaldas,
    queden heridos, enredados y atrapados.

14 Por tanto, gobernantes insolentes de este pueblo de Jerusalén,
    escuchen la palabra del Señor:
15 Ustedes dicen: «Hemos hecho un convenio con la muerte;
    hemos hecho una alianza con el sepulcro.[b]
Cuando venga una calamidad abrumadora,
    no nos podrá alcanzar,
porque hemos hecho de la mentira nuestro refugio
    y del engaño nuestro escondite».

16 Por eso dice el Señor y Dios:

«Miren, yo pongo en Sión una piedra probada,
    piedra angular y preciosa para un cimiento firme;
    el que crea no se tambaleará.
17 Pondré como nivel la justicia
    y la rectitud como plomada.
El granizo arrasará con el refugio de la mentira
    y las aguas inundarán el escondite.
18 Se anulará el convenio que hicieron con la muerte;
    quedará sin efecto su alianza con el sepulcro.[c]
Cuando venga la calamidad abrumadora,
    a ustedes los aplastará.
19 Cada vez que pase, los arrebatará;
    pasará mañana tras mañana, de día y de noche».

La comprensión de este mensaje
    causará terror absoluto.
20 La cama es demasiado estrecha para estirarse en ella;
    la manta es demasiado corta para envolverse en ella.
21 Sí, el Señor se levantará como en el monte Perasín,
    se moverá como en el valle de Gabaón;
para llevar a cabo su extraña obra,
    para realizar su insólita tarea.
22 Ahora bien, dejen de burlarse,
    no sea que se aprieten más sus cadenas;
porque me ha hecho saber el Señor, el Señor de los Ejércitos,
    acerca de la destrucción decretada contra todo el país.

23 Escuchen, oigan mi voz;
    presten atención, oigan mi palabra:
24 Cuando un agricultor ara para sembrar,
    ¿lo hace sin descanso?
¿Se pasa todo el día abriendo surcos y removiendo el terreno?
25 Después de que ha emparejado la superficie,
    ¿no siembra eneldo y esparce comino?
¿No siembra trigo en hileras,[d]
    cebada en el lugar debido
    y centeno en las orillas?
26 Es Dios quien lo instruye
    y le enseña cómo hacerlo.

27 Porque no se trilla el eneldo con rastrillo
    ni sobre el comino se pasa una rueda de carreta,
sino que el eneldo se golpea con una vara
    y el comino con un palo.
28 El grano se tritura, pero no demasiado
    ni tampoco se trilla sin descanso.
Se le pasan las ruedas de la carreta,
    pero los caballos no lo trituran.
29 También esto viene del Señor de los Ejércitos,
    admirable por su consejo
    y magnífico por su sabiduría.

Ay de la Ciudad de David

29 ¡Ay, Ariel, Ariel,
    ciudad donde acampó David!
Añadan a un año otro año más
    y que prosiga el ciclo de las fiestas.
Pero a Ariel la sitiaré;
    habrá llanto y lamento,
    y será para mí como un brasero del altar.[e]
Acamparé contra ti, te rodearé;
    te cercaré con empalizadas
    y levantaré contra ti torres de asedio.
Humillada, desde el suelo elevarás tu voz;
    tu palabra apenas se levantará del polvo.
Saldrá tu voz de la tierra como si fuera la de un fantasma;
    tu palabra, desde el polvo, apenas será un susurro.

Pero la multitud de tus enemigos quedará hecha polvo fino,
    y la multitud de violentos será como la paja que se lleva el viento.
De repente, en un instante,
    vendrá contra ti el Señor de los Ejércitos;
vendrá con truenos, terremotos y gran estruendo;
    vendrá con una violenta tormenta y con devoradoras llamas de fuego.
La multitud de todas las naciones que batallan contra Ariel,
    todos los que luchan contra ella y contra su fortaleza,
aquellos que la asedian, serán como un sueño,
    como una visión nocturna.
Como el hambriento que sueña que está comiendo,
    pero despierta y aún tiene hambre;
como el sediento que sueña que está bebiendo,
    pero despierta y la sed reseca su garganta.
Así sucederá con la multitud de todas las naciones
    que luchan contra el monte Sión.

Pierdan el juicio, quédense pasmados,
    pierdan la vista, quédense ciegos;
embriáguense, pero no con vino;
    tambaléense, pero no por la cerveza.
10 El Señor ha derramado sobre ustedes un espíritu de profundo sueño;
    a los profetas les tapó los ojos,
    a los visionarios les cubrió la cabeza.

11 Para ustedes, toda esta visión no es otra cosa que palabras en un rollo de pergamino sellado. Si dan el rollo a alguien que sepa leer y dicen: «Lea esto, por favor», este responderá: «No puedo hacerlo; está sellado». 12 Si dan el rollo a alguien que no sepa leer y dicen: «Lea esto, por favor», este responderá: «No sé leer».

13 El Señor dice:

«Este pueblo se acerca a mí con la boca
    y me honra con los labios,
    pero su corazón está lejos de mí.
Su adoración es solo un mandamiento humano
    que le ha sido enseñado.
14 Por eso, una vez más asombraré a este pueblo
    con prodigios maravillosos;
perecerá la sabiduría de sus sabios,
    y se esfumará la inteligencia de sus inteligentes».
15 ¡Ay! de los que, para esconder sus planes,
    se ocultan del Señor en las profundidades.
Cometen sus fechorías en la oscuridad y piensan:
    «¿Quién nos ve? ¿Quién nos conoce?».
16 ¡Qué manera de pervertir las cosas!
    ¿Acaso el alfarero es igual al barro?
¿Puede un objeto decir del que lo modeló:
    «Él no me hizo»?
¿Puede una vasija decir de su alfarero:
    «Él no entiende nada»?

17 Muy pronto el Líbano se convertirá en campo fértil,
    y el campo fértil se convertirá en bosque.
18 En aquel día podrán los sordos oír la lectura del rollo,
    y los ojos de los ciegos podrán ver
    sin tinieblas ni oscuridad.
19 Los pobres volverán a alegrarse en el Señor;
    los más necesitados se regocijarán en el Santo de Israel.
20 Se desvanecerán los violentos,
    desaparecerán los insolentes,
    y serán exterminados todos los que se desvelan para hacer el mal:
21 los que con una palabra hacen culpable a una persona,
    los que en el tribunal ponen trampas al defensor
    y con engaños perjudican al inocente.

22 Por eso, el Señor, el redentor de Abraham, dice así a los descendientes de Jacob:

«Jacob ya no será avergonzado
    ni palidecerá su rostro.
23 Cuando él vea a sus hijos
    y la obra de mis manos en medio de él,
todos ellos santificarán mi nombre;
    santificarán al Santo de Jacob
    y temerán al Dios de Israel.
24 Los de espíritu extraviado recibirán entendimiento
    y los murmuradores aceptarán ser instruidos».

Notas al pie

  1. 28:10 Versículo de difícil traducción (posiblemente imitación burlona de una lección del abecedario); también en v. 13.
  2. 28:15 sepulcro. Lit. Seol.
  3. 28:18 sepulcro. Lit. Seol.
  4. 28:25 hileras. Palabra de difícil traducción.
  5. 29:2 un brasero del altar. Esta frase traduce una palabra hebrea que es idéntica al nombre Ariel.

Anuncio de la destrucción de Samaria

28 1-3 Isaías anunció:

«¡Qué mal le va a ir a Samaria,
capital del reino del norte!
Para sus habitantes
esa ciudad es como una corona
que los llena de orgullo.
Pero es una ciudad de borrachos
y sus jefes son como flores
que se secan y se marchitan.

»Asiria es un pueblo poderoso;
Dios lo tiene preparado
como una tormenta de granizo,
como lluvia torrencial y destructora,
como una terrible inundación.
Con su poder y su fuerza,
Asiria echará por tierra
a la ciudad de Samaria,
ese adorno de flores marchitas.
¡La arrancará como a fruta madura!

»Ese día, el Dios todopoderoso
será una corona maravillosa
para la gente de su pueblo
que aún quede con vida.
Dios hará que sus jueces sean justos
y dará valor a los soldados
que defiendan la ciudad».

Amenaza y promesas a Jerusalén

Isaías también dijo:

«Los profetas y los sacerdotes
se tambalean y tropiezan
por tanto licor que beben.
Están demasiado borrachos
para recibir palabra de Dios.
¡Todas sus mesas
están llenas de vómitos!
¡No hay un solo lugar limpio!
Además, se burlan de mí y dicen:
“¡Cómo se atreve a darnos lecciones
y a enseñarnos lo que dice Dios!
¡Ni que fuéramos niños chiquitos
10 que estuviéramos aprendiendo a leer!”

11 »Pues bien, si ustedes no hacen caso,
Dios les hablará,
pero lo hará en un lenguaje extraño,
en un idioma que no podrán entender.
12 Ya Dios les había dicho:
“Aquí hay tranquilidad;
¡aquí pueden descansar!”
Pero ustedes no quisieron obedecerlo.
13 Por eso Dios les hablará
como si fueran unos niños chiquitos
que apenas saben leer.
Serán como niños que empiezan a caminar:
se caerán de espaldas, se lastimarán
y no podrán levantarse.

Amenazas a los gobernantes

14 »Hombres sinvergüenzas,

que gobiernan en Jerusalén:
¡escuchen bien a Dios!

15 »Ustedes se sienten muy seguros
por haber hecho un trato con Egipto;
pero es un trato de muerte,
es un trato engañoso.

16 »Por eso Dios dice:
“Yo seré para Jerusalén
una piedra valiosa y escogida.
Seré la piedra principal
y serviré de base al edificio.
El que se apoye en mí
podrá vivir tranquilo,
17 porque usaré como guías
la justicia y la rectitud”.

»Ustedes confían
en que Egipto los protegerá,
pero el poderoso ejército de Asiria
destruirá esa falsa protección.
18 Quedará anulado ese trato de muerte
que hicieron con Egipto;
cuando llegue el momento terrible,
una gran desgracia los aplastará.
19 El enemigo los arrastrará
cada vez que los ataque.
Vendrá día tras día;
vendrá de día y de noche.
Cuando oigan que viene el enemigo,
se pondrán a temblar de miedo.
20 Será como si se acostaran
en una cama demasiado chica;
será como si se abrigaran
con una manta demasiado corta.

21 »Dios está decidido a actuar
como actuó en el monte Perasim;
Dios va a manifestar su enojo
como en el valle de Gabaón.
Dios está a punto de actuar,
y lo hará de manera misteriosa.
22 Por eso, ¡dejen ya de burlarse,
no sea que les vaya peor!
He sabido que el Dios todopoderoso
ha resuelto destruir todo el país.

La parábola del agricultor

23 »¡Presten atención,

oigan mis palabras,
escúchenlas con cuidado!
24 Cuando el campesino va a sembrar,
no se pasa todo el tiempo
arando, abriendo surcos
y rastrillando el terreno.
25 Primero empareja la tierra,
luego arroja las semillas
de eneldo o de comino,
siembra el trigo en hileras,
y planta cebada y centeno
en los bordes de su campo.
26-28 Porque el eneldo no se trilla
ni se pasa sobre el comino
la rueda de una carreta;
el eneldo se sacude con un palo,
y el comino, con una vara.
El trigo no se trilla sin parar;
más bien, se le pasa una carreta
y el grano se separa,
pero sin molerlo.

»Todo esto se aprende de Dios.
29 Todo este conocimiento
proviene del Dios todopoderoso.
Dios hace planes admirables
y los realiza con sabiduría».

Ataque contra Jerusalén

29 Dios anunció:

«Jerusalén, ciudad de David,
¡qué mal te va a ir!
Sigue con tus celebraciones
y haz fiesta año tras año,
pero yo te pondré en problemas.

»Entonces gritarás y llorarás,
y la ciudad arderá en llamas,
como se queman los animales
que se ofrecen en el altar.
Yo te rodearé con mi ejército;
pondré alrededor de ti
fortalezas y torres de asalto.
Tú serás humillada,
quedarás tirada en el suelo;
apenas se oirán tus palabras,
tu voz parecerá la de un fantasma.

5-6 »Yo, el Dios todopoderoso,
castigaré de repente a tus enemigos.
Los castigaré con truenos,
con el estruendo de un terremoto,
con incendios, tormentas y tempestades.
Los muchos enemigos que te persiguen
quedarán hechos polvo;
¡serán arrastrados como paja!

»Los ejércitos que atacan a Jerusalén
y quieren derribar sus fortalezas
desaparecerán por completo,
como la niebla al salir el sol.
Los grandes ejércitos
que atacan a Jerusalén,
morirán de hambre y de sed.
Soñarán que comen y beben,
pero cuando se despierten
tendrán el estómago vacío
y la garganta reseca».

Israel parece estar ciego

Isaías dijo:

«¡Ustedes los profetas,
sigan actuando como unos tontos!
¡Sigan como ciegos, sin ver nada!
¡Sigan tambaleándose como borrachos,
aun sin haber tomado vino!
10 Dios ha hecho caer sobre ustedes
un sueño muy profundo.
Ustedes los profetas
deberían ser los ojos del pueblo,
pero son incapaces de ver nada.
11 Las visiones que reciben de Dios
no pueden entenderlas;
es como si quisieran leer
el texto de un libro cerrado.
Si se les diera ese libro
para que lo leyeran,
dirían: “No podemos leerlo,
porque el libro está cerrado”.
12 Mientras tanto, otros dicen:
“No podemos leerlo
porque no sabemos leer”».

13 Dios le dijo a Isaías:

«Este pueblo dice que me ama,
pero no me obedece;
me rinde culto,
pero no es sincero
ni lo hace de corazón.
14 Por eso, voy a hacer
cosas tan maravillosas
que este pueblo quedará asombrado.
Entonces destruiré
la sabiduría de sus hombres sabios
y la inteligencia
de sus personas inteligentes».

Advertencia de Isaías

15 Isaías dijo:

«¡Qué mal les va a ir
a los que tratan de esconderse
para que Dios no los vea
cuando hacen sus planes malvados!
¡Qué mal les va a ir
a los que andan diciendo:
“Nadie nos ve, nadie se da cuenta”!
16 ¡Pero eso es un disparate!
Es como si el plato de barro
quisiera ser igual a quien lo hizo.
Pero no hay un solo objeto
que pueda decir a quien lo hizo:
“¡Tú no me hiciste!”
Tampoco puede decirle:
“¡No sabes lo que estás haciendo!”

Promesa de salvación a Israel

17 »Dentro de muy poco tiempo,

el bosque se convertirá
en un campo de cultivo,
y el campo de cultivo
se parecerá a un bosque.
18 En ese día los sordos podrán oír
cuando alguien les lea en voz alta,
y los ciegos podrán ver,
porque para ellos
no habrá más oscuridad.
19 Los más pobres y necesitados
se alegrarán en nuestro santo Dios.
20 Ese día desaparecerán
los insolentes, los orgullosos,
y los que sólo piensan
en hacer el mal.

21 »Se acabarán los mentirosos
que acusan a otros falsamente.
Se acabarán también
los que ponen trampas a los jueces
y los que con engaños
niegan justicia al inocente».

22 Por eso dice el Dios de Israel, el que rescató a Abraham:

«De ahora en adelante,
los israelitas no sentirán más vergüenza.
23 Cuando sus descendientes vean
todo lo que hice entre ellos,
reconocerán que soy un Dios santo
y me mostrarán su respeto.
24 Los que estaban confundidos
aprenderán a ser sabios;
¡hasta los más testarudos
aceptarán mis enseñanzas!»

Condenación de Efraín

28 ¡Ay de la corona de arrogancia de los ebrios(A) de Efraín(B),
y de la flor marchita de su gloriosa hermosura,
que está sobre la cabeza del valle fértil[a]
de los vencidos[b] por el vino!
He aquí que uno, fuerte y poderoso, de parte del Señor(C),
como tormenta de granizo, tempestad destructora(D),
como tormenta de violentas aguas desbordadas(E),
los ha lanzado a tierra con su mano.
Con los pies es hollada(F) la corona de arrogancia de los ebrios de Efraín.
Y la flor marchita de su gloriosa hermosura,
que está sobre la cabeza del valle fértil[c],
será como el primer higo maduro antes del verano(G),
el cual uno ve[d],
y tan pronto[e] está en su mano[f] se lo traga.
En aquel día el Señor(H) de los ejércitos será hermosa corona,
gloriosa diadema(I) para el remanente de su pueblo,
espíritu de justicia para el que se sienta en juicio(J),
y fuerza para aquellos que rechazan el asalto[g] en la puerta(K).
También estos se tambalean por el vino(L) y dan traspiés por el licor:
el sacerdote(M) y el profeta(N) por el licor se tambalean,
están ofuscados por el vino, por el licor(O) dan traspiés;
vacilan en sus visiones(P),
titubean al pronunciar juicio.
Porque todas las mesas están llenas de vómito(Q) asqueroso, sin un solo lugar limpio.

Amonestación a Jerusalén

¿A quién enseñará conocimiento(R),
o a quién interpretará el mensaje?
¿A los recién destetados(S)?
¿A los recién quitados de los pechos?
10 Porque dice:
«Mandato sobre mandato, mandato sobre mandato(T),
línea sobre línea, línea sobre línea,
un poco aquí, un poco allá[h]».
11 En verdad, con tartamudez de labios
y en lengua extranjera(U), Él hablará a este pueblo,
12 al cual había dicho: Aquí hay reposo, dad reposo al cansado;
y: Aquí hay descanso. Pero no quisieron escuchar(V).
13 Por lo cual la palabra del Señor para ellos será:
Mandato sobre mandato, mandato sobre mandato,
línea sobre línea, línea sobre línea,
un poco aquí, un poco allá[i],
para que vayan y caigan de espaldas,
se quiebren los huesos,
y sean enlazados y apresados(W).
14 Por tanto, oíd la palabra del Señor(X), oh escarnecedores(Y),
gobernantes de este pueblo que está en Jerusalén.
15 Porque habéis dicho: Hemos hecho un pacto con la muerte,
hemos hecho un convenio[j] con el Seol[k](Z);
cuando pase el azote abrumador[l], no nos alcanzará(AA),
porque hemos hecho de la mentira(AB) nuestro refugio
y en el engaño nos hemos escondido(AC).
16 Por tanto, así dice el Señor Dios[m]:
He aquí, pongo por fundamento en Sión una piedra(AD), una piedra probada,
angular, preciosa, fundamental, bien colocada.
Él que crea en ella no será perturbado[n](AE).
17 Pondré el juicio(AF) por medida,
y la justicia por nivel;
el granizo barrerá el refugio de la mentira,
y las aguas cubrirán el escondite(AG).
18 Y será abolido[o] vuestro pacto con la muerte(AH),
vuestro convenio con el Seol no quedará en pie(AI);
cuando pase el azote abrumador[p](AJ),
seréis su holladero(AK).
19 Cuantas veces pase, os arrebatará[q](AL),
porque pasará mañana tras mañana(AM), de día y de noche;
y será terrible[r] espanto(AN) el comprender el mensaje.
20 La cama es muy corta para estirarse en ella,
y la manta muy estrecha para envolverse en ella(AO).
21 Porque el Señor se levantará como en el monte Perazim(AP),
se enojará como en el valle de Gabaón(AQ),
para hacer su tarea(AR), su extraña tarea(AS),
y para hacer su obra, su extraordinaria[s] obra.
22 Y ahora, no continuéis como escarnecedores(AT),
no sea que se hagan más fuertes vuestros grillos,
pues de parte del Señor, Dios[t] de los ejércitos, he oído
de una destrucción decretada sobre la tierra(AU).

23 Escuchad y oíd mi voz,
prestad atención y oíd mis palabras.
24 ¿Acaso para sembrar se pasa arando el labrador todo el día,
abriendo y rastrillando su tierra?
25 ¿No allana su superficie
y siembra eneldo y esparce comino(AV),
y siembra[u] trigo en hileras,
cebada en su debido lugar, y centeno(AW) dentro de sus límites[v]?
26 Porque su Dios le instruye y le enseña cómo hacerlo[w].
27 Pues no se trilla el eneldo con el trillo(AX),
ni se hace girar la rueda de carreta sobre el comino;
sino que con vara se sacude el eneldo, y con palo el comino.
28 El grano[x] es triturado,
pero no se le seguirá trillando indefinidamente;
debido a que la rueda de la carreta y sus caballos lo dañarán[y],
no se le triturará más.
29 También esto procede del Señor de los ejércitos,
que ha hecho maravilloso su consejo(AY) y grande su sabiduría(AZ).

Ariel y sus enemigos

29 ¡Ay, Ariel[z], Ariel[aa] la ciudad donde acampó David(BA)!
Añadid año sobre año, celebrad las fiestas a su tiempo[ab](BB).
Y traeré angustias a Ariel,
y será una ciudad de lamento y de duelo(BC);
será para mí como un Ariel.
Acamparé contra ti rodeándote[ac](BD),
pondré contra ti vallas de asedio,
y levantaré contra ti baluartes.
Entonces serás humillada,
desde el suelo hablarás,
y desde el polvo donde estás postrada
saldrá tu habla.
Tu voz será también como la de un espíritu[ad] de la tierra,
y desde el polvo susurrará tu habla(BE).

Pero la multitud de tus enemigos[ae] será como polvo fino(BF),
y la multitud de los crueles(BG) como paja que se va volando[af];
sucederá en un instante, de repente(BH).
Serás castigada[ag](BI) por el Señor de los ejércitos con truenos y terremotos(BJ) y gran ruido,
con torbellino y tempestad y con llama de fuego consumidor.
Y será como un sueño, una visión nocturna(BK),
la multitud de todas las naciones(BL) que combaten contra Ariel,
todos los que combaten contra ella y su fortaleza, y los que la afligen.
Y será como cuando un hambriento sueña,
y he aquí, está comiendo;
pero cuando despierta, su hambre no ha sido satisfecha[ah].
O como cuando un sediento sueña,
y he aquí, está bebiendo;
pero cuando despierta, he aquí, está desfallecido,
y su sed no ha sido aplacada[ai].
Así será la multitud de todas las naciones
que combaten contra el monte Sión(BM).

Deteneos y esperad(BN),
cegaos y sed ciegos.
Se embriagan, pero no con vino(BO);
se tambalean, pero no con licor.
10 Porque el Señor ha derramado sobre vosotros espíritu de sueño profundo(BP),
Él ha cerrado vuestros ojos: los profetas(BQ),
y ha cubierto vuestras cabezas: los videntes.

11 Y toda la visión será para vosotros como las palabras de un libro[aj] sellado(BR), que cuando se le da al que sabe leer[ak], diciéndole: Lee esto, por favor; y él dirá: No puedo, porque está sellado. 12 Entonces el libro[al] será dado al que no sabe leer[am], diciéndole: Lee esto, por favor; y él dirá: No sé leer[an].

Hipocresía de Israel

13 Dijo entonces el Señor:
Por cuanto este pueblo se me acerca con sus palabras[ao]
y me honra con sus labios,
pero aleja de mí su corazón,
y su veneración[ap] hacia mí es solo una tradición[aq] aprendida de memoria(BS),
14 por tanto, he aquí, volveré a hacer maravillas(BT) con este pueblo, prodigiosas maravillas;
y perecerá la sabiduría de sus sabios,
y se eclipsará el entendimiento de sus entendidos(BU).

15 ¡Ay de los que van muy hondo
para esconder sus planes[ar](BV) al Señor,
y realizan[as] sus obras en tinieblas(BW)
y dicen: ¿Quién nos ve(BX), o quién nos conoce?
16 ¡Qué equivocación la vuestra!
¿Es acaso el alfarero como el barro,
para que lo que está hecho diga a su hacedor: Él no me hizo;
o lo que está formado diga al que lo formó(BY): Él no tiene entendimiento?

Redención de Israel

17 ¿Acaso no queda ya muy poco tiempo
para que[at] el Líbano se convierta en campo fértil(BZ),
y el campo fértil sea considerado bosque?
18 En aquel día los sordos oirán(CA) las palabras de un libro(CB),
y desde la oscuridad y desde las tinieblas los ojos de los ciegos verán(CC).
19 Los afligidos(CD) aumentarán también su alegría en el Señor,
y los necesitados(CE) de la humanidad se regocijarán en el Santo de Israel.
20 Porque el violento tendrá su fin(CF), el escarnecedor(CG) será acabado,
y serán cortados todos los que se desvelan por hacer el mal(CH);
21 los que hacen que una persona sea acusada[au] por una palabra,
tienden lazos al que juzga en la puerta(CI),
y defraudan[av] al justo con vanos argumentos[aw](CJ).

22 Por tanto el Señor, que redimió a Abraham(CK), dice así acerca de la casa de Jacob:

Jacob no será ahora avergonzado(CL), ni palidecerá ahora su rostro;
23 porque cuando vea a sus hijos[ax](CM), la obra de mis manos(CN), en medio suyo,
ellos santificarán mi nombre;
ciertamente, santificarán(CO) al Santo de Jacob,
y tendrán temor al Dios de Israel.
24 Los descarriados(CP) de espíritu conocerán la verdad[ay](CQ),
y los murmuradores aceptarán[az] instrucción(CR).

Notas al pie

  1. Isaías 28:1 Lit., valle de grosura
  2. Isaías 28:1 Lit., golpeados
  3. Isaías 28:4 Lit., valle de grosura
  4. Isaías 28:4 Lit., el que está viendo lo ve
  5. Isaías 28:4 Lit., mientras aún
  6. Isaías 28:4 Lit., palma
  7. Isaías 28:6 Lit., la batalla
  8. Isaías 28:10 Heb., Sav lasav sav lasav, kav lakav kav lakav, zeer sham zeer sham. Estos monosílabos del hebreo que imitan el balbuceo de un niño hacen burla a la predicación del profeta.
  9. Isaías 28:13 Véase nota del verso 10. Aquí el Señor responde a sus burlas imitándolas usando el lenguaje ininteligible de un conquistador.
  10. Isaías 28:15 Así en algunas versiones antiguas; en el T.M., vidente
  11. Isaías 28:15 I.e., región de los muertos
  12. Isaías 28:15 O, la inundación abrumadora
  13. Isaías 28:16 Heb., YHWH, generalmente traducido Señor
  14. Isaías 28:16 Lit., no se apresurará
  15. Isaías 28:18 Lit., cubierto
  16. Isaías 28:18 O, la inundación abrumadora
  17. Isaías 28:19 Lit., tomará
  18. Isaías 28:19 Lit., solo
  19. Isaías 28:21 Lit., extranjera
  20. Isaías 28:22 Heb., YHWH, generalmente traducido Señor
  21. Isaías 28:25 Lit., pone
  22. Isaías 28:25 Lit., su región
  23. Isaías 28:26 Lit., lo recto
  24. Isaías 28:28 Lit., pan
  25. Isaías 28:28 Lit., destruirían
  26. Isaías 29:1 I.e., León de Dios; refiriéndose a Jerusalén
  27. Isaías 29:1 I.e., León de Dios; refiriéndose a Jerusalén
  28. Isaías 29:1 Lit., que las fiestas sigan su curso
  29. Isaías 29:3 Lit., como un círculo
  30. Isaías 29:4 O, fantasma
  31. Isaías 29:5 Lit., extraños
  32. Isaías 29:5 Lit., que pasa
  33. Isaías 29:6 Lit., visitada
  34. Isaías 29:8 Lit., su alma está vacía
  35. Isaías 29:8 Lit., su alma está reseca
  36. Isaías 29:11 O, rollo
  37. Isaías 29:11 Lit., sabe de libros
  38. Isaías 29:12 O, rollo
  39. Isaías 29:12 Lit., no sabe de libros
  40. Isaías 29:12 Lit., No sé de libros
  41. Isaías 29:13 Lit., boca
  42. Isaías 29:13 Lit., temor de mí
  43. Isaías 29:13 Lit., un mandamiento de hombres
  44. Isaías 29:15 Lit., el consejo
  45. Isaías 29:15 Lit., están
  46. Isaías 29:17 Lit., y
  47. Isaías 29:21 Lit., ponen bajo condenación a una persona
  48. Isaías 29:21 Lit., desvían
  49. Isaías 29:21 Lit., con confusión
  50. Isaías 29:23 O, sus hijos vean
  51. Isaías 29:24 Lit., el entendimiento
  52. Isaías 29:24 Lit., aprenderán