Add parallel Print Page Options

Dios dijo: «Que haya luz»,
    y hubo luz.
Al ver Dios que la luz era buena,
    la separó de la oscuridad.
Dios llamó a la luz «día»
    y a la oscuridad «noche».
Llegó la tarde y después la mañana.
    Ese fue el primer día.

Read full chapter