Add parallel Print Page Options

Basta de haber traído extranjeros incircuncisos de corazón e incircuncisos de carne, para estar en mi santuario y profanar mi templo, ofreciendo mi pan —el sebo y la sangre— e invalidando mi pacto con todas las abominaciones de ustedes. No han guardado las ordenanzas respecto de mis cosas sagradas, sino que han puesto extranjeros para guardar las ordenanzas de mi santuario a su gusto. Así ha dicho el SEÑOR Dios[a]: Ningún extranjero, incircunciso de corazón e incircunciso de carne, de todos los extranjeros que están entre los hijos de Israel, entrará en mi santuario’.

Read full chapter

Footnotes

  1. Ezequiel 44:9 Lit., Señor YHWH.