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y estad atentos; y cuando veáis salir a las hijas de Silo a bailar en corros, salid de las viñas, y arrebatad cada uno mujer para sí de las hijas de Silo, e idos a tierra de Benjamín.
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Estén, pues, atentos tus ojos a la oración de tu siervo y a la plegaria de tu pueblo Israel, para oírlos en todo aquello por lo cual te invocaren;
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Ahora, pues, oh Dios mío, te ruego que estén abiertos tus ojos y atentos tus oídos a la oración en este lugar.
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Ahora estarán abiertos mis ojos y atentos mis oídos a la oración en este lugar;
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Y leyó en el libro delante de la plaza que está delante de la puerta de las Aguas, desde el alba hasta el mediodía, en presencia de hombres y mujeres y de todos los que podían entender; y los oídos de todo el pueblo estaban atentos al libro de la ley.
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Oíd ahora mi razonamiento, Y estad atentos a los argumentos de mis labios.
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Oíd, sabios, mis palabras; Y vosotros, doctos, estadme atentos.
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Los ojos de Jehová están sobre los justos, Y atentos sus oídos al clamor de ellos.
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Señor, oye mi voz; Estén atentos tus oídos A la voz de mi súplica.
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Beneficios de la sabiduría
Oíd, hijos, la enseñanza de un padre, Y estad atentos, para que conozcáis cordura.
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Ahora pues, hijos, oídme, Y estad atentos a las razones de mi boca.
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Estad atentos, y oíd mi voz; atended, y oíd mi dicho.
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No se ofuscarán entonces los ojos de los que ven, y los oídos de los oyentes oirán atentos.
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Estad atentos a mí, pueblo mío, y oídme, nación mía; porque de mí saldrá la ley, y mi justicia para luz de los pueblos.
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Castigo de la apostasía de Israel
Sacerdotes, oíd esto, y estad atentos, casa de Israel, y casa del rey, escuchad; porque para vosotros es el juicio, pues habéis sido lazo en Mizpa, y red tendida sobre Tabor.
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Y le estaban atentos, porque con sus artes mágicas les había engañado mucho tiempo.
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Porque los ojos del Señor están sobre los justos, Y sus oídos atentos a sus oraciones; Pero el rostro del Señor está contra aquellos que hacen el mal.
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Tenemos también la palabra profética más segura, a la cual hacéis bien en estar atentos como a una antorcha que alumbra en lugar oscuro, hasta que el día esclarezca y el lucero de la mañana salga en vuestros corazones;