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Revised Common Lectionary (Complementary)

Daily Bible readings that follow the church liturgical year, with thematically matched Old and New Testament readings.
Duration: 1245 days
Reina-Valera 1995 (RVR1995)
Version
Jonás 3:10-4:11

10 Vio Dios lo que hicieron, que se convirtieron de su mal camino, y se arrepintió del mal que había anunciado hacerles, y no lo hizo.

Pero Jonás se disgustó en extremo, y se enojó. Así que oró a Jehová y le dijo:

—¡Ah, Jehová!, ¿no es esto lo que yo decía cuando aún estaba en mi tierra? Por eso me apresuré a huir a Tarsis, porque yo sabía que tú eres un Dios clemente y piadoso, tardo en enojarte y de gran misericordia, que te arrepientes del mal. Ahora, pues, Jehová, te ruego que me quites la vida, porque mejor me es la muerte que la vida.

Pero Jehová le respondió:

—¿Haces bien en enojarte tanto?

Jonás salió de la ciudad y acampó hacia el oriente de ella; allí se hizo una enramada y se sentó a su sombra, para ver qué sucedería en la ciudad. Entonces Jehová Dios dispuso que una calabacera creciera sobre Jonás para que su sombra le cubriera la cabeza y lo librara de su malestar. Jonás se alegró mucho por la calabacera. Pero, al amanecer del día siguiente, Dios dispuso que un gusano dañara la calabacera, y ésta se secó. Y aconteció que, al salir el sol, envió Dios un fuerte viento del este. El sol hirió a Jonás en la cabeza, y sintió que se desmayaba. Entonces, deseando la muerte, decía:

—Mejor sería para mí la muerte que la vida.

Pero Dios dijo a Jonás:

—¿Tanto te enojas por la calabacera?

—Mucho me enojo, hasta la muerte —respondió él.

10 Entonces Jehová le dijo:

—Tú tienes lástima de una calabacera en la que no trabajaste, ni a la cual has hecho crecer, que en espacio de una noche nació y en espacio de otra noche pereció, 11 ¿y no tendré yo piedad de Nínive, aquella gran ciudad donde hay más de ciento veinte mil personas que no saben discernir entre su mano derecha y su mano izquierda, y muchos animales?

Salmos 145:1-8

Alabanza por la bondad y el poder de Dios

Salmo de alabanza; de David

145 Te exaltaré, mi Dios, mi Rey,
y bendeciré tu nombre eternamente y para siempre.
Cada día te bendeciré
y alabaré tu nombre eternamente y para siempre.
Grande es Jehová y digno de suprema alabanza;
su grandeza es insondable.

Generación a generación celebrará tus obras
y anunciará tus poderosos hechos.
En la hermosura de la gloria de tu magnificencia
y en tus hechos maravillosos meditaré.
Del poder de tus hechos estupendos hablarán los hombres,
y yo publicaré tu grandeza.
Proclamarán la memoria de tu inmensa bondad,
y cantarán tu justicia.

Clemente y misericordioso es Jehová,
lento para la ira y grande en misericordia.

Filipenses 1:21-30

21 porque para mí el vivir es Cristo y el morir, ganancia.

22 Pero si el vivir en la carne resulta para mí en beneficio de la obra, no sé entonces qué escoger: 23 De ambas cosas estoy puesto en estrecho, teniendo deseo de partir y estar con Cristo, lo cual es muchísimo mejor; 24 pero quedar en la carne es más necesario por causa de vosotros. 25 Y confiado en esto, sé que quedaré, que aún permaneceré con todos vosotros, para vuestro provecho y gozo de la fe, 26 para que abunde vuestra gloria de mí en Cristo Jesús por mi presencia otra vez entre vosotros.

27 Solamente os ruego que os comportéis como es digno del evangelio de Cristo, para que, sea que vaya a veros o que esté ausente, oiga de vosotros que estáis firmes en un mismo espíritu, combatiendo unánimes por la fe del evangelio 28 y sin dejaros intimidar por los que se oponen, que para ellos ciertamente es indicio de perdición, pero para vosotros de salvación; y esto procede de Dios. 29 A vosotros os es concedido a causa de Cristo, no sólo que creáis en él, sino también que padezcáis por él, 30 teniendo el mismo conflicto que habéis visto en mí y ahora oís que hay en mí.

Mateo 20:1-16

Parábola de los obreros de la viña

20 »El reino de los cielos es semejante a un hombre, padre de familia, que salió por la mañana a contratar obreros para su viña. Y habiendo convenido con los obreros en un denario al día, los envió a su viña. Saliendo cerca de la hora tercera del día, vio a otros que estaban en la plaza desocupados y les dijo: “Id también vosotros a mi viña, y os daré lo que sea justo.” Y ellos fueron. Salió otra vez cerca de las horas sexta y novena, e hizo lo mismo. Y saliendo cerca de la hora undécima, halló a otros que estaban desocupados y les dijo: “¿Por qué estáis aquí todo el día desocupados?” Le dijeron: “Porque nadie nos ha contratado.” Él les dijo: “Id también vosotros a la viña, y recibiréis lo que sea justo.”

»Cuando llegó la noche, el señor de la viña dijo a su mayordomo: “Llama a los obreros y págales el jornal, comenzando desde los últimos hasta los primeros.” Llegaron los que habían ido cerca de la hora undécima y recibieron cada uno un denario. 10 Al llegar también los primeros, pensaron que habían de recibir más, pero también ellos recibieron cada uno un denario. 11 Y al recibirlo, murmuraban contra el padre de familia, 12 diciendo: “Estos últimos han trabajado una sola hora y los has tratado igual que a nosotros, que hemos soportado la carga y el calor del día.” 13 Él, respondiendo, dijo a uno de ellos: “Amigo, no te hago ninguna injusticia. ¿No conviniste conmigo en un denario? 14 Toma lo que es tuyo y vete; pero quiero dar a este último lo mismo que a ti. 15 ¿No me está permitido hacer lo que quiero con lo mío? ¿O tienes tú envidia, porque yo soy bueno?” 16 Así, los primeros serán últimos y los últimos, primeros, porque muchos son llamados, pero pocos escogidos.

Reina-Valera 1995 (RVR1995)

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