Add parallel Print Page Options

El joven rico

17 (A)Cuando Jesús salía para irse, vino un hombre corriendo, y arrodillándose delante de Él(B), le preguntó[a]: «Maestro bueno, ¿qué haré para heredar la vida eterna(C)?». 18 Jesús le respondió: «¿Por qué me llamas bueno? Nadie es bueno, sino solo uno, Dios. 19 Tú sabes los mandamientos: “No mates, no cometas adulterio, no hurtes, no des falso testimonio, no defraudes, honra a tu padre y a tu madre(D)”».

20 «Maestro, todo esto lo he guardado(E) desde mi juventud», dijo el hombre. 21 Jesús, mirándolo, lo amó y le dijo: «Una cosa te falta: ve y vende cuanto tienes y da a los pobres, y tendrás tesoro en el cielo(F); entonces vienes y me sigues». 22 Pero él, afligido por estas palabras, se fue triste, porque era dueño de muchos bienes.

Peligro de las riquezas

23 Jesús, mirando en derredor, dijo* a Sus discípulos: «¡Qué difícil será para los que tienen riquezas entrar en el reino de Dios(G)!». 24 Los discípulos se asombraron(H) de Sus palabras. Pero Jesús respondiendo de nuevo, les dijo*: «Hijos, ¡qué difícil es entrar en el reino de Dios[b]! 25 Es más fácil para un camello pasar por el ojo de una[c] aguja, que para un rico entrar en el reino de Dios(I)».

26 Ellos se asombraron aún más, diciendo entre sí[d]: «¿Y quién podrá salvarse?». 27 Mirándolos Jesús, dijo*: «Para los hombres es imposible, pero no para Dios, porque todas las cosas son posibles para Dios(J)». 28 Entonces Pedro comenzó a decir a Jesús: «Nosotros lo hemos dejado todo y te hemos seguido(K)».

29 Jesús respondió: «En verdad les digo, que no hay nadie que haya dejado casa, o hermanos, o hermanas, o madre, o padre, o hijos o tierras por causa de Mí y por causa del evangelio(L), 30 que no reciba cien veces más ahora en este tiempo: casas, y hermanos, y hermanas, y madres, e hijos, y tierras junto con persecuciones; y en el siglo venidero(M), la vida eterna. 31 Pero muchos primeros serán últimos, y los últimos, primeros(N)».

Read full chapter

Footnotes

  1. Marcos 10:17 Lit. preguntándole.
  2. Marcos 10:24 Algunos mss. agregan: para los que confían en las riquezas.
  3. Marcos 10:25 Lit. la.
  4. Marcos 10:26 Algunos mss. dicen: diciéndole.

El joven rico

(Mt. 19.16-30; Lc. 18.18-30)

17 Al salir él para seguir su camino, vino uno corriendo, e hincando la rodilla delante de él, le preguntó: Maestro bueno, ¿qué haré para heredar la vida eterna? 18 Jesús le dijo: ¿Por qué me llamas bueno? Ninguno hay bueno, sino solo uno, Dios. 19 Los mandamientos sabes: No adulteres.(A) No mates.(B) No hurtes.(C) No digas falso testimonio.(D) No defraudes. Honra a tu padre y a tu madre.(E) 20 Él entonces, respondiendo, le dijo: Maestro, todo esto lo he guardado desde mi juventud. 21 Entonces Jesús, mirándole, le amó, y le dijo: Una cosa te falta: anda, vende todo lo que tienes, y dalo a los pobres, y tendrás tesoro en el cielo; y ven, sígueme, tomando tu cruz. 22 Pero él, afligido por esta palabra, se fue triste, porque tenía muchas posesiones.

23 Entonces Jesús, mirando alrededor, dijo a sus discípulos: ¡Cuán difícilmente entrarán en el reino de Dios los que tienen riquezas! 24 Los discípulos se asombraron de sus palabras; pero Jesús, respondiendo, volvió a decirles: Hijos, ¡cuán difícil les es entrar en el reino de Dios, a los que confían en las riquezas! 25 Más fácil es pasar un camello por el ojo de una aguja, que entrar un rico en el reino de Dios. 26 Ellos se asombraban aún más, diciendo entre sí: ¿Quién, pues, podrá ser salvo? 27 Entonces Jesús, mirándolos, dijo: Para los hombres es imposible, mas para Dios, no; porque todas las cosas son posibles para Dios. 28 Entonces Pedro comenzó a decirle: He aquí, nosotros lo hemos dejado todo, y te hemos seguido. 29 Respondió Jesús y dijo: De cierto os digo que no hay ninguno que haya dejado casa, o hermanos, o hermanas, o padre, o madre, o mujer, o hijos, o tierras, por causa de mí y del evangelio, 30 que no reciba cien veces más ahora en este tiempo; casas, hermanos, hermanas, madres, hijos, y tierras, con persecuciones; y en el siglo venidero la vida eterna. 31 Pero muchos primeros serán postreros, y los postreros, primeros.(F)

Read full chapter

El joven rico

16 (A)Y un hombre se acercó a Jesús y le dijo: «Maestro, ¿qué cosa buena haré para obtener la vida eterna(B)?». 17 Jesús le respondió: «¿Por qué me preguntas acerca de lo que es bueno? Solo Uno es bueno; pero si deseas entrar en la vida(C), guarda los mandamientos». 18 «¿Cuáles?», preguntó* el hombre. Y Jesús respondió: «No matarás; no cometerás adulterio; no hurtarás; no darás falso testimonio(D); 19 honra a tu padre y a tu madre(E); y amarás a tu prójimo como a ti mismo(F)».

20 El joven dijo*: «Todo esto lo he guardado; ¿qué me falta todavía?». 21 Jesús le respondió: «Si quieres ser perfecto, ve y vende lo que posees(G) y da a los pobres, y tendrás tesoro en los cielos(H); y ven, sé Mi discípulo». 22 Pero al oír el joven estas palabras[a], se fue triste, porque era dueño de muchos bienes.

Peligro de las riquezas

23 Jesús dijo entonces a Sus discípulos: «En verdad les digo que es difícil que un rico entre en el reino de los cielos(I). 24 Otra vez les digo que es más fácil para un camello pasar por el ojo de una aguja, que para un rico entrar en el reino de Dios(J)». 25 Al oír esto, los discípulos estaban llenos de asombro, y decían: «Entonces, ¿quién podrá salvarse?». 26 Jesús, mirándolos, les dijo: «Para los hombres eso es imposible, pero para Dios todo es posible(K)».

27 Entonces Pedro le respondió: «Mira, nosotros lo hemos dejado todo y te hemos seguido; ¿qué, pues, recibiremos[b]?». 28 Jesús les dijo: «En verdad les digo que ustedes que me han seguido, en la regeneración, cuando el Hijo del Hombre(L) se siente en el trono de Su gloria, ustedes se sentarán también sobre doce tronos(M) para juzgar a las doce tribus de Israel. 29 Y todo el que haya dejado casas, o hermanos, o hermanas, o padre, o madre[c], o hijos o tierras por Mi nombre(N), recibirá cien[d] veces más, y heredará la vida eterna. 30 Pero muchos primeros serán últimos, y los últimos, primeros(O).

Read full chapter

Footnotes

  1. Mateo 19:22 Lit. la palabra.
  2. Mateo 19:27 Lit. habrá para nosotros.
  3. Mateo 19:29 Muchos mss. agregan: o mujer.
  4. Mateo 19:29 Algunos mss. dicen: muchas.

El joven rico

(Mr. 10.17-31; Lc. 18.18-30)

16 Entonces vino uno y le dijo: Maestro bueno, ¿qué bien haré para tener la vida eterna? 17 Él le dijo: ¿Por qué me llamas bueno? Ninguno hay bueno sino uno: Dios. Mas si quieres entrar en la vida, guarda los mandamientos. 18 Le dijo: ¿Cuáles? Y Jesús dijo: No matarás.(A) No adulterarás.(B) No hurtarás.(C) No dirás falso testimonio.(D) 19 Honra a tu padre y a tu madre;(E) y, Amarás a tu prójimo como a ti mismo.(F) 20 El joven le dijo: Todo esto lo he guardado desde mi juventud. ¿Qué más me falta? 21 Jesús le dijo: Si quieres ser perfecto, anda, vende lo que tienes, y dalo a los pobres, y tendrás tesoro en el cielo; y ven y sígueme. 22 Oyendo el joven esta palabra, se fue triste, porque tenía muchas posesiones.

23 Entonces Jesús dijo a sus discípulos: De cierto os digo, que difícilmente entrará un rico en el reino de los cielos. 24 Otra vez os digo, que es más fácil pasar un camello por el ojo de una aguja, que entrar un rico en el reino de Dios. 25 Sus discípulos, oyendo esto, se asombraron en gran manera, diciendo: ¿Quién, pues, podrá ser salvo? 26 Y mirándolos Jesús, les dijo: Para los hombres esto es imposible; mas para Dios todo es posible. 27 Entonces respondiendo Pedro, le dijo: He aquí, nosotros lo hemos dejado todo, y te hemos seguido; ¿qué, pues, tendremos? 28 Y Jesús les dijo: De cierto os digo que en la regeneración, cuando el Hijo del Hombre se siente en el trono de su gloria,(G) vosotros que me habéis seguido también os sentaréis sobre doce tronos, para juzgar a las doce tribus de Israel.(H) 29 Y cualquiera que haya dejado casas, o hermanos, o hermanas, o padre, o madre, o mujer, o hijos, o tierras, por mi nombre, recibirá cien veces más, y heredará la vida eterna. 30 Pero muchos primeros serán postreros, y postreros, primeros.(I)

Read full chapter

El joven rico

18 (A)Cierto hombre prominente[a] le preguntó a Jesús: «Maestro bueno, ¿qué haré para heredar la vida eterna?».

19 Jesús le respondió: «¿Por qué me llamas bueno? Nadie es bueno, sino solo uno, Dios. 20 Tú sabes los mandamientos: “No cometas adulterio, no mates, no hurtes, no des falso testimonio, honra a tu padre y a tu madre(B)”». 21 «Todo esto lo he guardado desde mi juventud», dijo el hombre.

22 Cuando Jesús oyó esto, le dijo: «Te falta todavía una cosa; vende todo lo que tienes y reparte entre los pobres, y tendrás tesoro en los cielos(C); y ven, sígueme(D)». 23 Pero al oír esto, se puso muy triste, pues era sumamente rico.

24 Mirándolo Jesús, dijo: «¡Qué difícil es que entren en el reino de Dios los que tienen riquezas(E)! 25 Porque es más fácil que un camello pase[b] por el ojo de una aguja, que el que un rico entre en el reino de Dios(F)». 26 Los que oyeron esto, dijeron: «¿Y quién podrá salvarse?». 27 «Lo imposible para los hombres es posible para Dios(G)», respondió Jesús.

28 Y Pedro dijo: «Nosotros hemos dejado todo[c] y te hemos seguido(H)». 29 Entonces Él les contestó: «En verdad les digo, que no hay nadie que haya dejado casa, o mujer, o hermanos, o padres o hijos por la causa del reino de Dios(I), 30 que no reciba muchas veces más en este tiempo, y en el siglo venidero(J), la vida eterna».

Read full chapter

Footnotes

  1. Lucas 18:18 O principal.
  2. Lucas 18:25 Lit. entre.
  3. Lucas 18:28 Lit. lo nuestro.

El joven rico

(Mt. 19.16-30; Mr. 10.17-31)

18 Un hombre principal le preguntó, diciendo: Maestro bueno, ¿qué haré para heredar la vida eterna? 19 Jesús le dijo: ¿Por qué me llamas bueno? Ninguno hay bueno, sino solo Dios. 20 Los mandamientos sabes: No adulterarás;(A) no matarás;(B) no hurtarás;(C) no dirás falso testimonio;(D) honra a tu padre y a tu madre.(E) 21 Él dijo: Todo esto lo he guardado desde mi juventud. 22 Jesús, oyendo esto, le dijo: Aún te falta una cosa: vende todo lo que tienes, y dalo a los pobres, y tendrás tesoro en el cielo; y ven, sígueme. 23 Entonces él, oyendo esto, se puso muy triste, porque era muy rico. 24 Al ver Jesús que se había entristecido mucho, dijo: ¡Cuán difícilmente entrarán en el reino de Dios los que tienen riquezas! 25 Porque es más fácil pasar un camello por el ojo de una aguja, que entrar un rico en el reino de Dios. 26 Y los que oyeron esto dijeron: ¿Quién, pues, podrá ser salvo? 27 Él les dijo: Lo que es imposible para los hombres, es posible para Dios. 28 Entonces Pedro dijo: He aquí, nosotros hemos dejado nuestras posesiones y te hemos seguido. 29 Y él les dijo: De cierto os digo, que no hay nadie que haya dejado casa, o padres, o hermanos, o mujer, o hijos, por el reino de Dios, 30 que no haya de recibir mucho más en este tiempo, y en el siglo venidero la vida eterna.

Read full chapter