El canto a la viña

Cantaré en nombre de mi querido amigo
    una canción dedicada a su viña.
Mi querido amigo tenía una viña
    en una ladera fértil.
La cavó, la limpió de piedras
    y la plantó con las mejores cepas.
Edificó una torre en medio de ella
    y además preparó un lagar.
Él esperaba que diera buenas uvas,
    pero acabó dando uvas agrias.

«Y ahora, habitantes de Jerusalén, hombres de Judá,
    juzguen entre mi viña y yo.
¿Qué más se podría hacer por mi viña
    que yo no lo haya hecho?
Yo esperaba que diera buenas uvas;
    ¿por qué dio uvas agrias?
Voy a decirles
    lo que haré con mi viña:
Le quitaré su cerco
    para que sirva de pasto;
derribaré su muro
    para que sea pisoteada.
La dejaré desolada
    y no será podada ni cultivada;
    le crecerán espinos y cardos.
Mandaré que las nubes
    no derramen lluvia sobre ella».

La viña del Señor de los Ejércitos
    es la nación de Israel;
el pueblo de Judá
    es su huerto preferido.
Él esperaba justicia, pero encontró ríos de sangre;
    esperaba rectitud, pero encontró gritos de angustia.

Maldiciones contra los explotadores

¡Ay de aquellos que acaparan casa tras casa
    y se apropian de campo tras campo
hasta que no dejan lugar para nadie más,
    y terminan viviendo solos en la tierra!

El Señor de los Ejércitos me ha dicho al oído:

«Ciertamente muchas casas quedarán devastadas
    y no habrá quien habite las grandes mansiones.
10 Tres hectáreas[a] de viña solo producirán un bato[b] de vino
    y un jómer[c] de semilla dará tan solo un efa[d] de grano».

11 ¡Ay de los que madrugan
    para ir tras bebidas embriagantes,
que se quedan hasta muy tarde
    para encenderse con vino!
12 En sus banquetes hay arpas,
    liras, panderos, flautas y vino;
pero no se fijan en los hechos del Señor
    ni tienen en cuenta las obras de sus manos.
13 Por eso mi pueblo será exiliado
    por falta de conocimiento;
sus nobles perecerán de hambre
    y la gente común morirá de sed.
14 Por eso la muerte[e] ensancha su garganta,
    y desmesuradamente abre su boca.
Allí bajan nobles y plebeyos
    con sus juergas y diversiones.
15 El pueblo será humillado,
    la humanidad, doblegada
    y abatidos los ojos altivos.
16 Pero el Señor de los Ejércitos será exaltado en justicia,
    el Dios santo se mostrará santo en rectitud.
17 Los corderos pastarán como en praderas propias
    y las cabras[f] comerán entre las ruinas de los ricos.

18 ¡Ay de los que arrastran iniquidad con cuerdas de mentira
    y el pecado con sogas de carreta!
19 Dicen: «¡Que Dios se apure,
    que apresure su obra
    para que la veamos;
que se acerque y se cumpla
    el plan del Santo de Israel,
    para que lo conozcamos!».

20 ¡Ay de los que llaman a lo malo bueno
    y a lo bueno malo,
que tienen las tinieblas por luz
    y la luz por tinieblas,
que tienen lo amargo por dulce
    y lo dulce por amargo!

21 ¡Ay de los que se consideran sabios,
    de los que se creen inteligentes!

22 ¡Ay de los valientes para beber vino,
    de los campeones que mezclan bebidas embriagantes,
23 de los que por soborno absuelven al culpable
    y niegan sus derechos al inocente!
24 Por eso, así como las lenguas de fuego devoran la paja
    y el pasto seco se consume en las llamas,
su raíz se pudrirá
    y, como el polvo, se disipará su flor.
Porque han rechazado la Ley del Señor de los Ejércitos
    y han desdeñado la palabra del Santo de Israel.
25 Por eso se enciende la ira del Señor contra su pueblo,
    levanta la mano contra él y lo golpea;
las montañas se estremecen,
    los cadáveres quedan como basura en medio de las calles.

A pesar de todo esto, la ira de Dios no se ha aplacado;
    su mano aún sigue extendida.

26 Con una bandera hará señas a una nación lejana,
    con un silbido la llamará desde el extremo de la tierra,
y esta nación llegará
    presta y veloz.
27 Ninguno de ellos se cansa ni tropieza,
    ni dormita ni se duerme;
a ninguno se le afloja el cinturón
    ni se le rompe la correa de las sandalias.
28 Sus flechas son puntiagudas,
    tensos todos sus arcos;
parecen dura piedra los cascos de sus caballos
    y torbellino las ruedas de sus carros.
29 Su rugido es el de una leona,
    como el de los leoncillos:
gruñe y atrapa la presa,
    y se la lleva sin que nadie se la arrebate.
30 En aquel día bramará contra ella
    como brama el mar.
Si alguien contempla la tierra,
    la verá sombría y angustiada;
    entonces la luz se ocultará tras negros nubarrones.

La misión de Isaías

El año de la muerte del rey Uzías vi al Señor sentado en un trono alto y excelso; las orlas de su manto llenaban el Templo. Por encima de él había serafines, cada uno de los cuales tenía seis alas: con dos de ellas se cubrían el rostro, con dos se cubrían los pies y con dos volaban. Y se decían el uno al otro:

«Santo, santo, santo es el Señor de los Ejércitos;
    toda la tierra está llena de su gloria».

Al sonido de sus voces se estremecieron los umbrales de las puertas y el Templo se llenó de humo.

Entonces grité: «¡Ay de mí, que estoy perdido! Soy un hombre de labios impuros y vivo en medio de un pueblo de labios impuros y mis ojos han visto al Rey, al Señor de los Ejércitos».

En ese momento voló hacia mí uno de los serafines. Traía en la mano una brasa que, con unas tenazas, había tomado del altar. Con ella me tocó los labios y me dijo:

«Mira, esto ha tocado tus labios; tu maldad ha sido borrada y tu pecado, perdonado».

Entonces oí la voz del Señor que decía:

—¿A quién enviaré? ¿Quién irá por nosotros?

Y respondí:

—Aquí estoy. ¡Envíame a mí!

Él dijo:

—Ve y dile a este pueblo:

»“Oigan bien, pero no entiendan;
    miren bien, pero no perciban”.
10 Haz insensible el corazón de este pueblo;
    endurece sus oídos
    y cierra sus ojos,
no sea que vea con sus ojos,
    oiga con sus oídos
    y entienda con su corazón,
se convierta y sea sanado».

11 Entonces exclamé:

—¿Hasta cuándo, Señor?

Y él respondió:

—Hasta que las ciudades queden destruidas
    y sin habitante alguno;
hasta que las casas queden deshabitadas
    y los campos asolados y en ruinas;
12 hasta que el Señor haya enviado lejos a la gente
    y sean muchos los lugares abandonados en el país.
13 Y, si aún queda en la tierra una décima parte,
    esta volverá a ser devastada.
Pero así como al talar la encina y el roble
    queda parte del tronco,
    esa parte es el linaje santo.

La señal de Emanuel

Acaz, hijo de Jotán y nieto de Uzías, reinaba en Judá. En el tiempo de Rezín, rey de Aram y de Pécaj, hijo de Remalías, rey de Israel, subieron contra Jerusalén para atacarla, pero no pudieron conquistarla.

En el palacio de David se recibió la noticia de que Aram se había aliado con Efraín. Entonces se estremeció el corazón de Acaz y el de su pueblo, como se estremecen por el viento los árboles del bosque.

El Señor dijo a Isaías: «Ve con tu hijo Sear Yasub[g] a encontrarte con Acaz donde termina el acueducto del estanque superior, en el camino que conduce al Campo del Lavandero. Dile que tenga cuidado y no pierda la calma; que no desfallezca su corazón[h] ante el enojo ardiente de Rezín y Aram ni ante el hijo de Remalías; que no se descorazone a causa de esos dos tizones humeantes. Dile también que Aram y Efraín, junto con el hijo de Remalías, han tramado hacerle mal, pues piensan subir contra Judá, provocar el pánico, conquistarla y poner allí como rey al hijo de Tabel. Pero dile además que yo, el Señor y Dios, digo:

»“Eso no se cumplirá
    ni sucederá.
La cabeza de Aram es Damasco
    y la cabeza de Damasco es Rezín;
pero dentro de sesenta y cinco años
    Efraín será destrozado hasta dejar de ser pueblo.
La cabeza de Efraín es Samaria
    y la cabeza de Samaria es el hijo de Remalías;
si ustedes no creen en mí,
    no permanecerán[i] firmes”».

10 El Señor se dirigió a Acaz de nuevo:

11 —Pide que el Señor tu Dios te dé una señal, ya sea en lo profundo del abismo o en lo más alto del cielo.

12 Pero Acaz respondió:

—No voy a pedir nada. ¡No pondré a prueba al Señor!

13 Entonces Isaías dijo: «¡Escuchen ahora ustedes, los de la dinastía de David! ¿No les basta con agotar la paciencia de los hombres, que hacen lo mismo con mi Dios? 14 Por eso, el Señor mismo les dará una señal: La virgen[j] concebirá y dará a luz un hijo y lo llamará Emanuel.[k] 15 Hasta que sepa elegir lo bueno y rechazar lo malo, comerá cuajada con miel. 16 Porque antes de que el niño sepa elegir lo bueno y rechazar lo malo, la tierra de los dos reyes que tú temes quedará abandonada. 17 El Señor hará venir sobre ti, sobre tu pueblo y sobre la dinastía de tu padre días como no se conocieron desde que Efraín se separó de Judá, pues hará venir al rey de Asiria».

18 En aquel día el Señor llamará con un silbido a la mosca que está en los lejanos ríos de Egipto y a la abeja que está en la tierra de Asiria. 19 Todas ellas vendrán y anidarán en las quebradas profundas, en las grietas de las rocas, en todos los matorrales espinosos y sobre todos los abrevaderos. 20 En aquel día, con el rey de Asiria como navaja prestada del otro lado del río Éufrates, el Señor afeitará a Israel la cabeza, el vello de sus partes privadas[l] y la barba. 21 En aquel día, un hombre criará una ternera y dos cabras; 22 y darán tanta leche que tendrá leche cuajada para comer. Además, todos los que permanezcan en la tierra comerán cuajada con miel. 23 En aquel día, allí donde hubo mil viñedos que costaban mil piezas de plata cada uno, no quedarán más que espinos y cardos, 24 los cuales cubrirán toda la tierra. Solo se podrá entrar allí con arco y flecha. 25 Y por temor a estos espinos y a estos cardos, ya no irás a los cerros que antes se cultivaban con el azadón, pues se convertirán en lugares donde se suelta el ganado y corretean las ovejas.

Asiria, el instrumento del Señor

El Señor me dijo: «Toma una tablilla grande y con un estilete común escribe sobre ella: “Tocante a Maher Salal Jasbaz”.[m] Yo convocaré como testigos confiables al sacerdote Urías y a Zacarías, hijo de Jeberequías».

Luego tuve relaciones con la profetisa y ella concibió y dio a luz un hijo. Entonces el Señor me dijo: «Ponle por nombre Maher Salal Jasbaz. Antes de que el niño aprenda a decir “papá” y “mamá”, la riqueza de Damasco y el botín de Samaria serán llevados ante el rey de Asiria».

El Señor volvió a decirme:

«Por cuanto este pueblo ha rechazado
    las mansas corrientes de Siloé
y se regocija con Rezín
    y con el hijo de Remalías,
el Señor está a punto de traer contra ellos
    las impetuosas crecientes del río Éufrates:
    al rey de Asiria con toda su gloria.
Rebasará todos sus canales,
    desbordará todas sus orillas;
pasará hasta Judá, la inundará
    y crecerá hasta llegarle al cuello.
Sus alas extendidas, ¡oh Emanuel!,[n]
    cubrirán la anchura de tu tierra».

¡Alcen el grito de guerra, pueblos, pues serán derrotados!
    ¡Escuchen, tierras distantes!
¡Prepárense para la guerra, pues serán destrozadas!
    ¡Prepárense para la guerra, pues serán destrozadas!
10 Tracen su estrategia, pero será desbaratada;
    propongan su plan, pero no se realizará,
    porque Dios está con nosotros.[o]

Hay que temer a Dios

11 El Señor me habló fuertemente y me advirtió que no siguiera el camino de este pueblo. Me dijo:

12 «No digan ustedes que es conspiración
    todo lo que llama conspiración esta gente;
no teman lo que ellos temen
    ni se dejen asustar.
13 Solo al Señor de los Ejércitos tendrán ustedes por santo,
    solo a él deben honrarlo,
    solo a él han de temerlo.
14     Él será un santuario.
Pero será una piedra de tropiezo
    para las dos casas de Israel;
    una roca que los hará caer.
¡Será para los habitantes de Jerusalén
    un lazo y una trampa!
15 Muchos de ellos tropezarán;
    caerán y serán quebrantados,
    se les tenderán trampas y en ellas quedarán atrapados».

16 Guarda bien el testimonio;
    sella la Ley entre mis discípulos.
17 El Señor ha escondido su rostro del pueblo de Jacob,
    pero yo esperaré en él,
pues en él tengo puesta mi esperanza.

18 Aquí me tienen, con los hijos que el Señor me ha dado. Somos en Israel señales y presagios del Señor de los Ejércitos, que habita en el monte Sión.

19 Si alguien les dice: «Consulten a las médiums y a los espiritistas que susurran y musitan; ¿acaso no es deber de un pueblo consultar a sus dioses y a los muertos en favor de los vivos?», 20 yo les digo: «¡Aténganse a la Ley y al testimonio!». Para quienes no se atengan a esto no habrá un amanecer. 21 Ustedes habrán de enfurecerse cuando, angustiados y hambrientos, vaguen por la tierra. Levantando los ojos al cielo, maldecirán a su rey y a su Dios 22 y, clavando la mirada en la tierra, solo verán aflicción, tinieblas y espantosa penumbra; ¡serán arrojados a una oscuridad total!

Footnotes

  1. 5:10 tres hectáreas. El hebreo dice tres yugadas. Es decir, la cantidad de terreno que diez yuntas de bueyes podían arar en un día.
  2. 5:10 Es decir, aprox. 22 l.
  3. 5:10 Es decir, aprox. 160 kg.
  4. 5:10 Es decir, aprox. 16 kg.
  5. 5:14 la muerte. Lit. Seol.
  6. 5:17 las cabras (LXX); los forasteros (TM).
  7. 7:3 En hebreo, Sear Yasub significa un remanente volverá.
  8. 7:4 corazón. En la Biblia se usa para designar el asiento de las emociones, pensamientos y voluntad, es decir, el proceso de toma de decisiones del ser humano.
  9. 7:9 no creen en mí, / no permanecerán (lectura probable); no creen, / ciertamente no permanecerán (TM).
  10. 7:14 virgen. Alt. mujer joven.
  11. 7:14 En hebreo, Emanuel significa Dios con nosotros.
  12. 7:20 vello de sus partes privadas. Lit. vello de los pies.
  13. 8:1 En hebreo, Maher Salal Jasbaz significa Pronto al saqueo, presto al botín; también en v. 3.
  14. 8:8 En hebreo, Emanuel significa Dios con nosotros; véase también v. 10.
  15. 8:10 Dios está con nosotros. Lit. Emanuel; véase v. 8.

Parábola de la viña

Cantaré ahora a mi amado,
el canto de mi amado acerca de su viña.
Mi bien amado tenía una viña en una fértil colina[a](A).
La cavó por todas partes, quitó sus piedras,
y la plantó de vides escogidas[b](B).
Edificó una torre en medio de ella,
y también excavó en ella un lagar[c];
y esperaba que produjera uvas buenas,
pero solo produjo uvas silvestres[d](C).

Y ahora, moradores de Jerusalén y hombres de Judá,
juzgad entre mí y mi viña(D).
¿Qué más se puede hacer por mi viña,
que[e] yo no haya hecho en ella(E)?
¿Por qué, cuando esperaba que produjera uvas buenas,
produjo uvas silvestres[f]?
Ahora pues, dejad que os diga
lo que yo he de hacer a mi viña:
quitaré su vallado(F) y será consumida;
derribaré su muro(G) y será hollada(H).
Y haré que quede desolada(I);
no será podada ni labrada,
y crecerán zarzas y espinos.
También mandaré a las nubes que no derramen[g] lluvia sobre ella(J).

Ciertamente, la viña del Señor de los ejércitos es la casa de Israel,
y los hombres de Judá su plantío delicioso(K).
Él esperaba equidad, pero he aquí derramamiento de sangre(L);
justicia, pero he aquí clamor.

Ayes contra los impíos

¡Ay de los que juntáis casa con casa,
y añadís campo a campo
hasta que no queda sitio alguno,
para habitar vosotros solos en medio de la tierra(M)!
A mis oídos el Señor de los ejércitos ha jurado:
Ciertamente muchas casas(N) serán desoladas(O),
grandes y hermosas, pero sin moradores.
10 Porque diez yugadas de viña producirán solo un bato[h] de vino(P),
y un homer[i] de semilla producirá solo un efa[j] de grano(Q).
11 ¡Ay de los que se levantan muy de mañana para ir tras la bebida(R),
de los que trasnochan para que el vino los encienda!
12 En sus banquetes hay lira y arpa, pandero y flauta, y vino(S),
y no contemplan las obras del Señor,
ni ven la obra de sus manos(T).

13 Por eso va cautivo mi pueblo por falta de discernimiento(U);
sus notables están muertos de hambre[k](V)
y su multitud reseca de sed.
14 Por tanto el Seol[l] ha ensanchado su garganta[m](W) y ha abierto sin medida su boca;
y a él desciende el esplendor de Jerusalén[n], su multitud, su alboroto y el que se divertía en ella.
15 El hombre común será humillado y el hombre de importancia abatido,
y los ojos de los altivos serán abatidos(X).
16 Pero el Señor de los ejércitos(Y) será exaltado por su juicio(Z),
y el Dios santo se mostrará santo por su justicia(AA).
17 Entonces pacerán los corderos como en su pastizal(AB),
y en los lugares desolados de los ricos[o], forasteros comerán.

18 ¡Ay de los que arrastran la iniquidad con cuerdas de falsedad[p]
y el pecado como con coyundas de carretas(AC)!
19 Los que dicen: Que se dé prisa, que apresure su obra, para que la veamos;
que se acerque y venga el propósito del Santo de Israel,
para que lo sepamos(AD).
20 ¡Ay de los que llaman al mal bien y al bien mal(AE),
que tienen[q] las tinieblas por luz y la luz por tinieblas(AF),
que tienen[r] lo amargo por dulce y lo dulce por amargo!
21 ¡Ay de los sabios a sus propios ojos
e inteligentes ante sí mismos(AG)!
22 ¡Ay de los héroes para beber vino
y valientes para mezclar bebidas(AH),
23 que justifican al impío por soborno(AI)
y quitan al justo su derecho[s](AJ)!

24 Por tanto, como consume el rastrojo la lengua de fuego(AK),
y la hierba seca cae ante la llama,
su raíz(AL) como podredumbre se volverá y su flor como polvo será esparcida[t](AM);
porque desecharon la ley del Señor de los ejércitos,
y despreciaron la palabra del Santo de Israel(AN).
25 Por esta causa se ha encendido la ira del Señor contra su pueblo(AO),
y ha extendido su mano contra ellos y los ha herido;
los montes temblaron(AP) y sus cadáveres yacen[u] como desecho en medio de las calles(AQ).
Con todo esto, no se ha agotado[v] su ira(AR),
y aún está extendida su mano(AS).

26 Alzará estandarte(AT) a la nación lejana[w],
y le silbará(AU) desde los confines de la tierra(AV),
y he aquí, vendrá muy pronto, con rapidez(AW).
27 En ella nadie está cansado ni nadie se tambalea(AX),
ninguno dormita ni duerme;
a ninguno se le ha desatado el cinturón de la cintura(AY),
ni se le ha roto la correa de su sandalia.
28 Sus flechas[x] están afiladas y todos sus arcos entesados(AZ);
los cascos de sus caballos son[y] como pedernal y las[z] ruedas de sus carros como torbellino(BA).
29 Su rugido es como de leona, ruge como leoncillos(BB);
gruñe y atrapa la presa(BC),
y se la lleva sin que nadie la libre(BD).
30 En aquel día gruñirá sobre ella como el bramido del mar(BE).
Si se mira hacia la tierra, he aquí, hay tinieblas y angustia;
aun la luz es oscurecida por sus nubes(BF).

Visión de Isaías

En el año de la muerte del rey Uzías[aa](BG) vi yo al Señor sentado sobre un trono alto y sublime(BH), y la orla de su manto llenaba el templo. Por encima de Él había[ab] serafines; cada uno tenía seis alas(BI): con dos cubrían sus rostros, con dos cubrían sus pies y con dos volaban. Y el uno al otro daba voces, diciendo[ac]:

Santo, Santo, Santo, es el Señor de los ejércitos(BJ),
llena está toda la tierra de[ad] su gloria(BK).

Y se estremecieron los cimientos[ae] de los umbrales a la voz del que clamaba, y la casa se llenó de humo(BL). Entonces dije:

¡Ay de mí! Porque perdido estoy(BM),
pues soy hombre de labios inmundos(BN)
y en medio de un pueblo de labios inmundos habito(BO),
porque han visto mis ojos al Rey, el Señor de los ejércitos(BP).

Entonces voló hacia mí uno de los serafines con un carbón encendido en su mano, que había tomado del altar(BQ) con las tenazas; y con él tocó mi boca, y dijo: He aquí, esto ha tocado tus labios(BR), y es quitada tu iniquidad y perdonado[af] tu pecado(BS). Y oí la voz del Señor(BT) que decía: ¿A quién enviaré, y quién irá por nosotros? Entonces respondí: Heme aquí; envíame a mí(BU). Y Él dijo:

Ve, y di a este pueblo:
«Escuchad bien, pero no entendáis;
mirad bien, pero no comprendáis(BV)».
10 Haz insensible[ag](BW) el corazón de este pueblo,
endurece[ah] sus oídos,
y nubla[ai] sus ojos,
no sea que vea con sus ojos,
y oiga con sus oídos(BX),
y entienda con su corazón,
y se arrepienta y sea curado(BY).

11 Entonces dije yo:

¿Hasta cuándo, Señor(BZ)? Y Él respondió:
Hasta que las ciudades estén destruidas y sin habitantes,
las casas sin gente,
y la tierra completamente desolada(CA);
12 hasta que el Señor haya alejado a los hombres(CB),
y sean muchos los lugares abandonados[aj] en medio de la tierra(CC).
13 Pero aún quedará una décima parte en ella,
y esta volverá a ser consumida
como el roble o la encina,
cuyo tronco[ak] permanece cuando es cortado(CD):
la simiente santa(CE) será su tronco[al].

Mensaje a Acaz

Y aconteció que en los días de Acaz, hijo de Jotam, hijo de Uzías, rey de Judá(CF), subió Rezín, rey de Aram(CG), con Peka, hijo de Remalías(CH), rey de Israel, a Jerusalén para combatir contra ella, pero no pudieron tomarla[am](CI). Y se dio aviso a la casa de David(CJ), diciendo: Los arameos han acampado en[an] Efraín(CK). Y se estremeció el corazón del rey[ao] y el corazón de su pueblo como se estremecen los árboles del bosque ante el viento(CL).

Entonces el Señor dijo a Isaías: Sal ahora al encuentro de Acaz, tú, y tu hijo Sear-jasub[ap], al extremo del acueducto del estanque superior, en la calzada del campo del Batanero[aq](CM), y dile: «Estate alerta, y ten calma(CN); no temas(CO) ni desmaye tu corazón(CP) ante estos dos cabos de tizones humeantes(CQ), a causa de la ira encendida de Rezín de Aram y del hijo de Remalías(CR). Porque Aram(CS) ha tramado mal contra ti, junto con Efraín y el hijo de Remalías, diciendo: “Subamos contra Judá y aterroricémosla[ar], hagamos una brecha en sus murallas[as] y pongamos por rey en medio de ella al hijo de Tabeel”. Por tanto, así dice el Señor Dios[at]: “No prevalecerá ni se cumplirá(CT). Porque la cabeza de Aram es Damasco(CU), y la cabeza de Damasco es Rezín (y dentro de otros sesenta y cinco años Efraín será destrozado, dejando de ser pueblo), y la cabeza de Efraín es Samaria, y la cabeza de Samaria es el hijo de Remalías. Si no creéis, de cierto no permaneceréis[au](CV)”».

10 El Señor habló de nuevo a Acaz, diciendo: 11 Pide para ti una señal(CW) del Señor tu Dios que sea tan profunda como el Seol[av] o tan alta[aw] como el cielo[ax]. 12 Pero Acaz respondió: No pediré, ni tentaré al Señor. 13 Entonces Isaías dijo: Oíd ahora, casa de David(CX): ¿Os parece poco cansar a los hombres(CY), que también cansaréis a mi Dios(CZ)? 14 Por tanto, el Señor mismo os dará una señal: He aquí, una virgen[ay] concebirá y dará a luz un hijo, y le pondrá por nombre Emmanuel[az](DA). 15 Comerá cuajada y miel(DB) hasta que sepa lo suficiente[ba] para desechar lo malo y escoger lo bueno. 16 Porque antes que el niño sepa desechar lo malo y escoger lo bueno(DC), será abandonada la tierra cuyos dos reyes tú temes(DD). 17 El Señor hará venir sobre ti, sobre tu pueblo y sobre la casa de tu padre(DE), días como nunca han venido desde el día en que Efraín se apartó de Judá, es decir, al rey de Asiria(DF). 18 Y sucederá en aquel día que el Señor silbará(DG) a la mosca que está en lo más remoto(DH) de los ríos[bb] de Egipto, y a la abeja que está en la tierra de Asiria; 19 y todas ellas vendrán y se posarán en los precipicios de las barrancas[bc], en las hendiduras de las peñas(DI), en todos los espinos(DJ) y en todos los abrevaderos[bd].

20 En aquel día, con navaja(DK) alquilada(DL) en las regiones más allá del Eufrates[be], es decir, con el rey de Asiria(DM), el Señor afeitará(DN) a Israel la cabeza y el pelo de las piernas, y también le quitará la barba.

21 En[bf] aquel día cada uno criará una novilla y un par de ovejas(DO); 22 y[bg] por la abundancia de leche que darán, comerá cuajada, porque todo el que quede en[bh] la tierra comerá cuajada y miel(DP). 23 En[bi] aquel día, en todo lugar donde había mil vides(DQ) valoradas en mil siclos de plata, habrá zarzas y espinos(DR). 24 Se irá allá con arcos y flechas, porque toda la tierra será zarzas y espinos. 25 Y en cuanto a todas las colinas que eran cultivadas con la azada, no irás allá por temor de las zarzas y espinos; se convertirán en lugar para soltar[bj] los bueyes y para ser hollado por las ovejas(DS).

Invasión de Asiria

Entonces el Señor me dijo: Toma para ti una tabla grande y escribe sobre ella(DT) en caracteres comunes[bk]: Veloz es el botín, rápida la presa[bl](DU). Y tomé conmigo[bm] como testigos fieles al sacerdote Urías(DV) y a Zacarías, hijo de Jeberequías. Me acerqué a la profetisa, y ella concibió y dio a luz un hijo. Y el Señor me dijo: Ponle por nombre Maher-shalal-hash-baz[bn](DW); porque antes que el niño sepa clamar(DX) «padre mío» o «madre mía», la riqueza de Damasco y el botín de Samaria(DY) serán llevados ante el rey de Asiria.

Y volvió el Señor a hablarme de nuevo, diciendo:

Por cuanto este pueblo ha rehusado las aguas de Siloé que corren mansamente(DZ),
y se ha regocijado en Rezín y en el hijo de Remalías(EA),
por tanto, he aquí, el Señor va a traer sobre ellos las aguas impetuosas y abundantes(EB) del Eufrates[bo](EC),
es decir, al rey de Asiria con toda su gloria(ED),
que se saldrá de todos sus cauces y pasará sobre todas sus riberas(EE).
Fluirá con ímpetu en Judá, inundará y seguirá adelante(EF),
hasta el cuello llegará(EG),
y la extensión de sus alas
llenará la anchura[bp] de tu tierra, oh Emmanuel[bq](EH).

Quebrantaos, pueblos(EI), que seréis destrozados[br];
prestad oído, confines todos de la tierra;
ceñíos, que seréis destrozados[bs];
ceñíos, que seréis destrozados[bt](EJ).
10 Trazad un plan, y será frustrado(EK);
proferid una palabra, y no permanecerá(EL),
porque Dios está con nosotros[bu](EM).

11 Pues así me habló el Señor con gran poder[bv](EN) y me instruyó para que no anduviera en el camino de este pueblo(EO), diciendo:

12 No digáis: «Es conspiración(EP)»,
a todo lo que este pueblo llama conspiración,
ni temáis lo que ellos temen[bw], ni os aterroricéis(EQ).
13 Al Señor de los ejércitos(ER) es a quien debéis tener por santo(ES).
Sea Él vuestro temor,
y sea Él vuestro terror.
14 Entonces Él vendrá a ser santuario(ET);
pero piedra de tropiezo y roca de escándalo(EU)
para ambas casas de Israel,
y lazo y trampa(EV) para los habitantes de Jerusalén.
15 Muchos tropezarán allí[bx],
y caerán y serán quebrantados;
serán enlazados y apresados(EW).

16 Ata el testimonio(EX), sella la ley[by](EY) entre mis discípulos(EZ). 17 Aguardaré al Señor(FA) que esconde su rostro(FB) de la casa de Jacob; sí, a Él esperaré. 18 He aquí, yo y los hijos que el Señor me ha dado(FC) estamos por señales y prodigios en Israel(FD), de parte del Señor de los ejércitos que mora en el monte Sión(FE).

19 Y cuando os digan: Consultad a los médium y a los adivinos(FF) que susurran y murmuran, decid: ¿No debe un pueblo consultar a su Dios(FG)? ¿Acaso consultará a los muertos por los vivos(FH)? 20 ¡A la ley[bz] y al testimonio(FI)! Si no hablan conforme a esta palabra, es porque no hay para ellos amanecer(FJ). 21 Y pasarán por la tierra[ca] oprimidos y hambrientos(FK); y sucederá que cuando tengan hambre, se enojarán y maldecirán a su rey[cb] y a su Dios, volviendo el rostro hacia arriba. 22 Después mirarán hacia la tierra, y he aquí, tribulación y tinieblas, lobreguez y angustia, y serán lanzados a la oscuridad(FL).

Footnotes

  1. Isaías 5:1 Lit., en un cuerno, hijo de grosura
  2. Isaías 5:2 Lit., una uva de rojo brillante
  3. Isaías 5:2 O, depósito de vino
  4. Isaías 5:2 O, malas
  5. Isaías 5:4 Lit., y
  6. Isaías 5:4 O, malas
  7. Isaías 5:6 Lit., no lluevan
  8. Isaías 5:10 Un bato equivale aprox. a 22 litros
  9. Isaías 5:10 Un homer equivale aprox. a 220 litros
  10. Isaías 5:10 Un efa equivale aprox. a 22 litros
  11. Isaías 5:13 Lit., su gloria son hombres hambrientos
  12. Isaías 5:14 I.e., región de los muertos
  13. Isaías 5:14 O, apetito
  14. Isaías 5:14 Lit., su esplendor
  15. Isaías 5:17 Lit., engordados
  16. Isaías 5:18 O, vanidad
  17. Isaías 5:20 Lit., ponen
  18. Isaías 5:20 Lit., ponen
  19. Isaías 5:23 Lit., justicia
  20. Isaías 5:24 Lit., ascenderá
  21. Isaías 5:25 Lit., eran
  22. Isaías 5:25 Lit., no se ha apartado
  23. Isaías 5:26 Probablemente, Asiria; lit., las naciones
  24. Isaías 5:28 Lit., La cual, sus flechas
  25. Isaías 5:28 Lit., son considerados
  26. Isaías 5:28 Lit., sus
  27. Isaías 6:1 O, Azarías
  28. Isaías 6:2 Lit., estaban de pie
  29. Isaías 6:3 Lit., y decía
  30. Isaías 6:3 Lit., la plenitud de toda la tierra es
  31. Isaías 6:4 Lit., los encajes de la puerta
  32. Isaías 6:7 Lit., expiado
  33. Isaías 6:10 Lit., Engruesa
  34. Isaías 6:10 Lit., haz pesados
  35. Isaías 6:10 Lit., embadurna
  36. Isaías 6:12 O, y el abandono sea grande
  37. Isaías 6:13 O, tocón
  38. Isaías 6:13 O, tocón
  39. Isaías 7:1 Lit., pelear contra ella
  40. Isaías 7:2 Lit., Aram se ha asentado sobre
  41. Isaías 7:2 Lit., su corazón
  42. Isaías 7:3 I.e., un remanente volverá
  43. Isaías 7:3 O, Lavandero
  44. Isaías 7:6 Lit., causémosle un terror pánico
  45. Isaías 7:6 Lit., en ella
  46. Isaías 7:7 Heb., YHWH, generalmente traducido Señor
  47. Isaías 7:9 O, seréis afirmados
  48. Isaías 7:11 I.e., región de los muertos
  49. Isaías 7:11 Así en algunas versiones antiguas; en el T.M., haz la petición profunda o alta
  50. Isaías 7:11 Lit., las alturas
  51. Isaías 7:14 O, doncella
  52. Isaías 7:14 I.e., Dios con nosotros
  53. Isaías 7:15 Lit., miel conforme a su conocimiento
  54. Isaías 7:18 I.e., el delta del Nilo
  55. Isaías 7:19 O, de los torrentes
  56. Isaías 7:19 O, pastos
  57. Isaías 7:20 Lit., río
  58. Isaías 7:21 Lit., Y sucederá en
  59. Isaías 7:22 Lit., y sucederá que
  60. Isaías 7:22 Lit., en medio de
  61. Isaías 7:23 Lit., Y sucederá en
  62. Isaías 7:25 Lit., enviar
  63. Isaías 8:1 Lit., con el estilo (i.e., punzón) del hombre
  64. Isaías 8:1 Heb., Maher-shalal-hash-baz
  65. Isaías 8:2 Otra posible lectura es: toma para mí
  66. Isaías 8:3 I.e., veloz es el botín, rápida es la presa
  67. Isaías 8:7 Lit., río
  68. Isaías 8:8 Lit., será la totalidad
  69. Isaías 8:8 I.e., Dios con nosotros
  70. Isaías 8:9 O, desalentaos
  71. Isaías 8:9 O, desalentaos
  72. Isaías 8:9 O, desalentaos
  73. Isaías 8:10 Heb., Immanu-el
  74. Isaías 8:11 Lit., poder de la mano
  75. Isaías 8:12 Lit., su temor
  76. Isaías 8:15 Lit., en ellos
  77. Isaías 8:16 O, enseñanza
  78. Isaías 8:20 O, enseñanza
  79. Isaías 8:21 Lit., ella
  80. Isaías 8:21 O, por su rey

Parábola de la viña

Ahora cantaré por mi amado el cantar de mi amado a su viña.(A) Tenía mi amado una viña en una ladera fértil. La había cercado y despedregado y plantado de vides escogidas; había edificado en medio de ella una torre, y hecho también en ella un lagar; y esperaba que diese uvas, y dio uvas silvestres.

Ahora, pues, vecinos de Jerusalén y varones de Judá, juzgad ahora entre mí y mi viña. ¿Qué más se podía hacer a mi viña, que yo no haya hecho en ella? ¿Cómo, esperando yo que diese uvas, ha dado uvas silvestres?

Os mostraré, pues, ahora lo que haré yo a mi viña: Le quitaré su vallado, y será consumida; aportillaré su cerca, y será hollada. Haré que quede desierta; no será podada ni cavada, y crecerán el cardo y los espinos; y aun a las nubes mandaré que no derramen lluvia sobre ella. Ciertamente la viña de Jehová de los ejércitos es la casa de Israel, y los hombres de Judá planta deliciosa suya. Esperaba juicio, y he aquí vileza; justicia, y he aquí clamor.

Ayes sobre los malvados

¡Ay de los que juntan casa a casa, y añaden heredad a heredad hasta ocuparlo todo! ¿Habitaréis vosotros solos en medio de la tierra? Ha llegado a mis oídos de parte de Jehová de los ejércitos, que las muchas casas han de quedar asoladas, sin morador las grandes y hermosas. 10 Y diez yugadas de viña producirán un bato, y un homer de semilla producirá un efa.

11 ¡Ay de los que se levantan de mañana para seguir la embriaguez; que se están hasta la noche, hasta que el vino los enciende! 12 Y en sus banquetes hay arpas, vihuelas, tamboriles, flautas y vino, y no miran la obra de Jehová, ni consideran la obra de sus manos. 13 Por tanto, mi pueblo fue llevado cautivo, porque no tuvo conocimiento; y su gloria pereció de hambre, y su multitud se secó de sed. 14 Por eso ensanchó su interior el Seol, y sin medida extendió su boca; y allá descenderá la gloria de ellos, y su multitud, y su fausto, y el que en él se regocijaba. 15 Y el hombre será humillado, y el varón será abatido, y serán bajados los ojos de los altivos. 16 Pero Jehová de los ejércitos será exaltado en juicio, y el Dios Santo será santificado con justicia. 17 Y los corderos serán apacentados según su costumbre; y extraños devorarán los campos desolados de los ricos.

18 ¡Ay de los que traen la iniquidad con cuerdas de vanidad, y el pecado como con coyundas de carreta, 19 los cuales dicen: Venga ya, apresúrese su obra, y veamos; acérquese, y venga el consejo del Santo de Israel, para que lo sepamos! 20 ¡Ay de los que a lo malo dicen bueno, y a lo bueno malo; que hacen de la luz tinieblas, y de las tinieblas luz; que ponen lo amargo por dulce, y lo dulce por amargo! 21 ¡Ay de los sabios en sus propios ojos, y de los que son prudentes delante de sí mismos! 22 ¡Ay de los que son valientes para beber vino, y hombres fuertes para mezclar bebida; 23 los que justifican al impío mediante cohecho, y al justo quitan su derecho!

24 Por tanto, como la lengua del fuego consume el rastrojo, y la llama devora la paja, así será su raíz como podredumbre, y su flor se desvanecerá como polvo; porque desecharon la ley de Jehová de los ejércitos, y abominaron la palabra del Santo de Israel. 25 Por esta causa se encendió el furor de Jehová contra su pueblo, y extendió contra él su mano, y le hirió; y se estremecieron los montes, y sus cadáveres fueron arrojados en medio de las calles. Con todo esto no ha cesado su furor, sino que todavía su mano está extendida.

26 Alzará pendón a naciones lejanas, y silbará al que está en el extremo de la tierra; y he aquí que vendrá pronto y velozmente. 27 No habrá entre ellos cansado, ni quien tropiece; ninguno se dormirá, ni le tomará sueño; a ninguno se le desatará el cinto de los lomos, ni se le romperá la correa de sus sandalias. 28 Sus saetas estarán afiladas, y todos sus arcos entesados; los cascos de sus caballos parecerán como de pedernal, y las ruedas de sus carros como torbellino. 29 Su rugido será como de león; rugirá a manera de leoncillo, crujirá los dientes, y arrebatará la presa; se la llevará con seguridad, y nadie se la quitará. 30 Y bramará sobre él en aquel día como bramido del mar; entonces mirará hacia la tierra, y he aquí tinieblas de tribulación, y en sus cielos se oscurecerá la luz.

Visión y llamamiento de Isaías

En el año que murió el rey Uzías(B) vi yo al Señor sentado sobre un trono alto y sublime, y sus faldas llenaban el templo. Por encima de él había serafines; cada uno tenía seis alas; con dos cubrían sus rostros, con dos cubrían sus pies, y con dos volaban. Y el uno al otro daba voces, diciendo: Santo, santo, santo, Jehová de los ejércitos;(C) toda la tierra está llena de su gloria. Y los quiciales de las puertas se estremecieron con la voz del que clamaba, y la casa se llenó de humo.(D) Entonces dije: ¡Ay de mí! que soy muerto; porque siendo hombre inmundo de labios, y habitando en medio de pueblo que tiene labios inmundos, han visto mis ojos al Rey, Jehová de los ejércitos.

Y voló hacia mí uno de los serafines, teniendo en su mano un carbón encendido, tomado del altar con unas tenazas; y tocando con él sobre mi boca, dijo: He aquí que esto tocó tus labios, y es quitada tu culpa, y limpio tu pecado. Después oí la voz del Señor, que decía: ¿A quién enviaré, y quién irá por nosotros? Entonces respondí yo: Heme aquí, envíame a mí. Y dijo: Anda, y di a este pueblo: Oíd bien, y no entendáis; ved por cierto, mas no comprendáis. 10 Engruesa el corazón de este pueblo, y agrava sus oídos, y ciega sus ojos, para que no vea con sus ojos, ni oiga con sus oídos, ni su corazón entienda, ni se convierta, y haya para él sanidad.(E) 11 Y yo dije: ¿Hasta cuándo, Señor? Y respondió él: Hasta que las ciudades estén asoladas y sin morador, y no haya hombre en las casas, y la tierra esté hecha un desierto; 12 hasta que Jehová haya echado lejos a los hombres, y multiplicado los lugares abandonados en medio de la tierra. 13 Y si quedare aún en ella la décima parte, esta volverá a ser destruida; pero como el roble y la encina, que al ser cortados aún queda el tronco, así será el tronco, la simiente santa.

Mensaje de Isaías a Acaz

Aconteció en los días de Acaz hijo de Jotam, hijo de Uzías, rey de Judá, que Rezín rey de Siria y Peka hijo de Remalías, rey de Israel, subieron contra Jerusalén para combatirla; pero no la pudieron tomar.(F) Y vino la nueva a la casa de David, diciendo: Siria se ha confederado con Efraín. Y se le estremeció el corazón, y el corazón de su pueblo, como se estremecen los árboles del monte a causa del viento.

Entonces dijo Jehová a Isaías: Sal ahora al encuentro de Acaz, tú, y Sear-jasub[a] tu hijo, al extremo del acueducto del estanque de arriba, en el camino de la heredad del Lavador, y dile: Guarda, y repósate; no temas, ni se turbe tu corazón a causa de estos dos cabos de tizón que humean, por el ardor de la ira de Rezín y de Siria, y del hijo de Remalías. Ha acordado maligno consejo contra ti el sirio, con Efraín y con el hijo de Remalías, diciendo: Vamos contra Judá y aterroricémosla, y repartámosla entre nosotros, y pongamos en medio de ella por rey al hijo de Tabeel. Por tanto, Jehová el Señor dice así: No subsistirá, ni será. Porque la cabeza de Siria es Damasco, y la cabeza de Damasco, Rezín; y dentro de sesenta y cinco años Efraín será quebrantado hasta dejar de ser pueblo. Y la cabeza de Efraín es Samaria, y la cabeza de Samaria el hijo de Remalías. Si vosotros no creyereis, de cierto no permaneceréis.

10 Habló también Jehová a Acaz, diciendo: 11 Pide para ti señal de Jehová tu Dios, demandándola ya sea de abajo en lo profundo, o de arriba en lo alto. 12 Y respondió Acaz: No pediré, y no tentaré a Jehová. 13 Dijo entonces Isaías: Oíd ahora, casa de David. ¿Os es poco el ser molestos a los hombres, sino que también lo seáis a mi Dios? 14 Por tanto, el Señor mismo os dará señal: He aquí que la virgen concebirá, y dará a luz un hijo,(G) y llamará su nombre Emanuel.[b] 15 Comerá mantequilla y miel, hasta que sepa desechar lo malo y escoger lo bueno. 16 Porque antes que el niño sepa desechar lo malo y escoger lo bueno, la tierra de los dos reyes que tú temes será abandonada. 17 Jehová hará venir sobre ti, sobre tu pueblo y sobre la casa de tu padre, días cuales nunca vinieron desde el día que Efraín se apartó de Judá, esto es, al rey de Asiria.

18 Y acontecerá que aquel día silbará Jehová a la mosca que está en el fin de los ríos de Egipto, y a la abeja que está en la tierra de Asiria; 19 y vendrán y acamparán todos en los valles desiertos, y en las cavernas de las piedras, y en todos los zarzales, y en todas las matas.

20 En aquel día el Señor raerá con navaja alquilada, con los que habitan al otro lado del río, esto es, con el rey de Asiria, cabeza y pelo de los pies, y aun la barba también quitará. 21 Acontecerá en aquel tiempo, que criará un hombre una vaca y dos ovejas; 22 y a causa de la abundancia de leche que darán, comerá mantequilla; ciertamente mantequilla y miel comerá el que quede en medio de la tierra.

23 Acontecerá también en aquel tiempo, que el lugar donde había mil vides que valían mil siclos de plata, será para espinos y cardos. 24 Con saetas y arco irán allá, porque toda la tierra será espinos y cardos. 25 Y a todos los montes que se cavaban con azada, no llegarán allá por el temor de los espinos y de los cardos, sino que serán para pasto de bueyes y para ser hollados de los ganados.

Sea Jehová vuestro temor

Me dijo Jehová: Toma una tabla grande, y escribe en ella con caracteres legibles tocante a Maher-salal-hasbaz.[c] Y junté conmigo por testigos fieles al sacerdote Urías y a Zacarías hijo de Jeberequías. Y me llegué a la profetisa, la cual concibió, y dio a luz un hijo. Y me dijo Jehová: Ponle por nombre Maher-salal-hasbaz. Porque antes que el niño sepa decir: Padre mío, y Madre mía, será quitada la riqueza de Damasco y los despojos de Samaria delante del rey de Asiria. Otra vez volvió Jehová a hablarme, diciendo: Por cuanto desechó este pueblo las aguas de Siloé, que corren mansamente, y se regocijó con Rezín y con el hijo de Remalías; he aquí, por tanto, que el Señor hace subir sobre ellos aguas de ríos, impetuosas y muchas, esto es, al rey de Asiria con todo su poder; el cual subirá sobre todos sus ríos, y pasará sobre todas sus riberas; y pasando hasta Judá, inundará y pasará adelante, y llegará hasta la garganta; y extendiendo sus alas, llenará la anchura de tu tierra, oh Emanuel.

Reuníos, pueblos, y seréis quebrantados; oíd, todos los que sois de lejanas tierras; ceñíos, y seréis quebrantados; disponeos, y seréis quebrantados. 10 Tomad consejo, y será anulado; proferid palabra, y no será firme, porque Dios está con nosotros.

11 Porque Jehová me dijo de esta manera con mano fuerte, y me enseñó que no caminase por el camino de este pueblo, diciendo: 12 No llaméis conspiración a todas las cosas que este pueblo llama conspiración; ni temáis lo que ellos temen, ni tengáis miedo. 13 A Jehová de los ejércitos, a él santificad;(H) sea él vuestro temor, y él sea vuestro miedo. 14 Entonces él será por santuario; pero a las dos casas de Israel, por piedra para tropezar, y por tropezadero para caer, y por lazo y por red al morador de Jerusalén. 15 Y muchos tropezarán entre ellos, y caerán, y serán quebrantados;(I) y se enredarán y serán apresados.

16 Ata el testimonio, sella la ley entre mis discípulos. 17 Esperaré, pues, a Jehová, el cual escondió su rostro de la casa de Jacob, y en él confiaré.(J) 18 He aquí, yo y los hijos que me dio Jehová(K) somos por señales y presagios en Israel, de parte de Jehová de los ejércitos, que mora en el monte de Sion. 19 Y si os dijeren: Preguntad a los encantadores y a los adivinos, que susurran hablando, responded: ¿No consultará el pueblo a su Dios? ¿Consultará a los muertos por los vivos? 20 ¡A la ley y al testimonio! Si no dijeren conforme a esto, es porque no les ha amanecido. 21 Y pasarán por la tierra fatigados y hambrientos, y acontecerá que teniendo hambre, se enojarán y maldecirán a su rey y a su Dios, levantando el rostro en alto. 22 Y mirarán a la tierra, y he aquí tribulación y tinieblas, oscuridad y angustia; y serán sumidos en las tinieblas.

Footnotes

  1. Isaías 7:3 Esto es, Un remanente volverá.
  2. Isaías 7:14 Esto es, Dios con nosotros.
  3. Isaías 8:1 Esto es, El despojo se apresura, la presa se precipita.