Hechos 28:1-11
Reina-Valera 1995
Pablo en la isla de Malta
28 Estando ya a salvo, supimos que la isla se llamaba Malta. 2 Los habitantes del lugar nos trataron con no poca humanidad, pues, encendiendo un fuego, nos recibieron a todos, a causa de la lluvia que caía, y del frío. 3 Entonces Pablo recogió algunas ramas secas y las echó al fuego; y una víbora, huyendo del calor, se le prendió en la mano. 4 Cuando la gente de allí vio la víbora colgando de su mano, decía:
—Ciertamente este hombre es homicida, a quien, escapado del mar, la justicia no deja vivir.
5 Pero él, sacudiendo la víbora en el fuego, ningún daño padeció. 6 Ellos estaban esperando que él se hinchara o cayera muerto de repente; pero habiendo esperado mucho, y viendo que ningún mal le venía, cambiaron de parecer y dijeron que era un dios.
7 En aquellos lugares había propiedades del hombre principal de la isla, llamado Publio, quien nos recibió y hospedó solícitamente tres días. 8 Y aconteció que el padre de Publio estaba en cama, enfermo de fiebre y de disentería. Pablo entró a verlo y, después de haber orado, le impuso las manos y lo sanó. 9 Viendo esto, también los otros que en la isla tenían enfermedades venían, y eran sanados; 10 los cuales también nos honraron con muchas atenciones, y cuando zarpamos nos proveyeron de todo lo necesario.
Pablo llega a Roma
11 Pasados tres meses nos hicimos a la vela en una nave alejandrina que había invernado en la isla, la cual tenía por enseña a Cástor y Pólux.
Read full chapterCopyright © 1995 by United Bible Societies