Add parallel Print Page Options

15 Ama a Dios y obedece su ley;
así llegarás a ser sabio.
La sabiduría te tratará con cariño,
como si fuera tu madre o tu esposa.
Te nutrirá de inteligencia
y aumentará tus conocimientos.
Únete a ella, busca su apoyo,
y nunca fracasarás.
En las reuniones del pueblo
la sabiduría te dirá qué decir
y te pondrá por encima de todos;
además, te hará muy feliz
y siempre serás famoso.

7-8 Pero los ingenuos y los pecadores,
los mentirosos y los presumidos,
nunca llegarán a ser sabios
ni sabrán lo que es la sabiduría.
Ella misma se apartará de ellos,
porque no la tomaron en cuenta.

9-10 Sólo los sabios merecen alabar a Dios
porque Dios les dio sabiduría.
Sin sabiduría no hay alabanza,
por eso los malvados no pueden adorarlo.

Hay que elegir lo bueno

11-12 Nunca culpes a Dios
por los pecados que cometes.
No digas que Dios te hizo pecar
porque él no soporta el pecado.
13 ¡Tampoco lo soportan
los que aman a Dios!

14 Al principio, Dios nos creó
y nos dio libertad para decidir.
15 Podemos cumplir los mandamientos
y hacer lo que a Dios le agrada.
16-17 Dios nos ha dado a elegir
entre la vida y la muerte,
entre el fuego y el agua,
y al final nos dará
lo que hayamos elegido.

18 Dios todo lo sabe,
Dios todo lo puede,
Dios todo lo ve.
19 Él sabe todo lo que hacemos,
y ama a quienes lo obedecen.
20 Dios no hace pecar a nadie;
por eso los que quieran pecar
recibirán su justo castigo.