1 Pedro 2:2-10
Reina Valera Contemporánea
2 Busquen, como los niños recién nacidos, la leche espiritual no adulterada, para que por medio de ella crezcan y sean salvos, 3 si es que han probado ya la bondad del Señor.(A)
La piedra viva
4 Acérquense a él, a la piedra viva que los hombres desecharon, pero que para Dios es una piedra escogida y preciosa. 5 Y ustedes también, como piedras vivas, sean edificados como casa espiritual y sacerdocio santo, para ofrecer sacrificios espirituales que Dios acepte por medio de Jesucristo. 6 Por eso dice la Escritura:
«¡Miren! Yo pongo en Sión
la principal piedra angular, escogida y preciosa;
y el que crea en ella no será avergonzado.»(B)
7 Para ustedes, los que creen, él es de gran valor; pero para los que no creen:
«La piedra que desecharon los edificadores
ha llegado a ser la piedra angular»,(C)
8 y también:
«Una piedra de tropiezo,
y una roca que hace tropezar.»(D)
Porque al ser desobedientes, ellos tropiezan en la palabra, para lo cual estaban ya destinados.
El pueblo de Dios
9 Pero ustedes son linaje escogido, real sacerdocio, nación santa,(E) pueblo adquirido por Dios,(F) para que anuncien los hechos maravillosos de aquel que los llamó de las tinieblas a su luz admirable. 10 Antes, ustedes no eran un pueblo; ¡pero ahora son el pueblo de Dios!; antes no habían sido compadecidos, pero ahora ya han sido compadecidos.(G)
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